donostia - Una nutrida manifestación recorrió ayer, en un ambiente festivo, las calles céntricas de Donostia para reclamar que la presa de ETA Sara Majarenas, a la que restan siete meses para cumplir su condena, sea excarcelada con el fin de que su hija, Izar, pueda iniciar la próxima semana el curso en la ikastola donostiarra de Intxaurrondo, donde ha sido matriculada.
Majarenas, quien recientemente se desvinculó de ETA , y su hija permanecen desde hace varios meses en un centro de acogida en Madrid, adonde fueron trasladadas tras la concesión del segundo grado a la reclusa y salir la niña del hospital en el que se recuperó de las graves lesiones sufridas al ser acuchillada por su padre en Benifaió (Valencia), durante una salida de fin de semana de la prisión en la que entonces la menor vivía con su madre.
La niña, de 3 años, ha sido matriculada en la ikastola de Intxaurrondo, aunque sus allegados temen que “no va a poder estar escolarizada en Donostia”.
El profesor de la ikastola de Intxaurrondo Mikel Ruíz de Larrinaga explicó el pasado lunes que, a su entender, “la situación es grave” porque ambas “están a 450 kilómetros de Donostia” y la niña “tiene que estudiar en un idioma que no es el suyo y vive en un piso tutelado por Instituciones Penitenciarias”. La marcha discurrió por el Boulevard de la capital guipuzcoana, donde se congregaron numerosas personas al coincidir la cita con el fin de la primera jornada de las regatas de traineras de La Concha.
“obligada en madrid” En declaraciones a los periodistas al final de la marcha, Araitz Zubimendi, portavoz de la plataforma Izarrekin Sara Etxera aseguró que “Izar es una niña vasca que, a pesar de lo que ha sufrido los tres primeros años de su vida, sigue recluida en un piso de Alcobendas, pudiendo salir solamente durante tres horas al día”.
Zubimendi lamentó que la menor vaya a ser “obligada” a ser escolarizada en un colegio madrileño porque “tiene sus lazos culturales, sociales y familiares en Donostia” y por eso es preciso que “pueda comenzar el curso el próximo jueves en la ikastola de Intxaurrondo con el resto de niños del barrio”. - Efe