BARCELONA - A las puertas de que el Parlament de Catalunya active las principales leyes que encaucen el referéndum del 1-O, el portavoz de la Generalitat, Jodri Turull, aseguró ayer que el Ejecutivo de Puigdemont maneja “la gestión de los tiempos y los anuncios” sobre la consulta “con el gran objetivo y determinación de garantizar que se vote. Y se a votar”, anunció, aunque sin dar pistas sobre las intenciones del Govern.

De “auténtico honor” calificó, por su parte, que él pueda sea responsable de firmar la ley de la consulta, hecho que podría producirse este próximo miércoles, 6 de septiembre, y a escasos días de una Diada en la que el soberanismo catalán se esforzará en dar una exhibición de fuerza. “No hay problema para firmar la ley ni el decreto de convocatoria cuando has dedicado tu vida política a esta causa”, puntualizó para, a continuación, afirmar que, frente a las inahbilitaciones o las multas, el procés seguirá su curso.

Precisamente las posibles represalias del Gobierno salieron ayer a relucir en la comparecencia semanal del portavoz del Gobierno español tras el Consejo de Ministros. Iñigo Méndez de Vigo aseveró que el Ejecutivo de Rajoy no solo está preparado “para todos los escenarios posibles”, si no que “contempla todas las posibilidades y tiene estudiadas las respuestas para hacer cumplir la ley”. “Este gobierno quiere acuerdos pero para bailar el tango se necesitan dos y uno sólo piensa en hacer un referéndum de secesión”, concluyó. - I. F.