Madrid -El PSOE y Unidos Podemos vivieron ayer el primer roce en su recién estrenada colaboración parlamentaria a cuenta de la propuesta que la formación morada ha presentado en el Congreso para acabar con el fraude en las becas y pedir prácticas reguladas, y de la que no había informado al grupo socialista. Fuentes socialistas reconocen que hubieran agradecido que el grupo confederal de Unidos Podemos-En Comù Podem-En Marea les informara antes de que ayer iban a presentar esa proposición de ley.
Recuerdan que en la reunión que los equipos de ambos grupos mantuvieron ayer y en la que pactaron abrir una “mesa de colaboración parlamentaria permanente”, el PSOE hizo mucho hincapié en su plan de rescate juvenil, que incluye medidas para evitar abusos y fraudes en la contratación de becarios, muchas en la misma línea de las propuestas de Unidos Podemos.
Las fuentes insisten en que no se trata de pedir permiso, pero sí de al menos informar, ya que esta no ha sido la mejor forma de iniciar una colaboración.
Desde Unidos Podemos, fuentes del grupo parlamentario confirman que no se informó al PSOE de que iban a presentar esa propuesta para luchar contra el “fraude de los becarios” y evitar que se utilicen como “sustitutos a puestos de trabajo”. Admiten que aún deben pulir los cauces de comunicación para que no se produzcan este tipo de malentendidos en una relación que debe ser cotidiana, y atribuyen a una coincidencia sin más el que la presentación de su propuesta se haya producido pocas horas después de haber inaugurado con el PSOE esa “mesa de colaboración”.
No obstante, las mismas fuentes recalcan que su grupo parlamentario lleva trabajando más de un año en esta iniciativa para garantizar los derechos de los becarios recogiendo las propuestas de la Oficina Precaria y el Consejo de la Juventud, y que colaborar con el PSOE de forma permanente no significa tampoco que uno u otro grupo vayan a “renunciar” a sus propias iniciativas. De hecho el PSOE también registrará hoy una iniciativa “propia” y “no conjunta” para pedir una comisión de investigación en el Congreso sobre el accidente ferroviario del Alvia ocurrido en Santiago en julio de 2013. - Efe