MADRID - Mariano Rajoy contraprogramó ayer al encuentro entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias reuniéndose en la Moncloa con el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, en la víspera de que este se reúna hoy con el líder del PSOE y apenas un par de horas después de que los representantes del PSOE y Podemos se entrevistaran para abrir una posible colaboración parlamentaria que desaloje al PP.
El presidente del Gobierno español intentó de este modo retomar la iniciativa política ante un Sánchez que, en sus primeros días como líder del socialismo, acapara la atención con sus iniciativas y sus llamadas a los dirigentes políticos para erigirse en el máximo referente de la oposición en el parlamento español.
El presidente español y Rivera acordaron que sus respectivos equipos empiecen a negociar cuanto antes el techo de gasto, la senda del déficit y los Presupuestos Generales del Estado para 2018. Ambos dirigentes mantuvieron un almuerzo de trabajo por espacio de algo más de dos horas, en el que también hablaron del “desafío separatista” de Catalunya y el Brexit, entre otros temas de interés político y económico.
Rivera advirtió a Sánchez que no puede plantear un “cordón sanitario” en el que el PP quede excluido del diálogo entre los demás partidos porque es el grupo con más escaños en el Congreso. “Nosotros queremos diálogo con el Gobierno, con el PSOE y con Podemos cuando podamos, pero una cosa es el diálogo y otra es un cordón sanitario”, declaró en rueda de prensa en la Cámara Baja antes de su almuerzo con Rajoy.
En su opinión, lo que pretende el dirigente socialista es “bloquear cualquier diálogo con el Gobierno”, pero eso supone que “no sale casi nada adelante” en el Congreso, porque para forjar mayorías amplias se necesita al PP. “En una legislatura con mayoría simple, se puede llegar a acuerdos en algunos temas de Estado como el terrorismo, la situación territorial y las reformas pendientes”, insistió.
El presidente de la formación naranja reiteró a Sánchez que está abierto a alcanzar acuerdos con el PSOE, como ya ha hecho en algunos asuntos, pero no a “montar mociones de censura cada tres meses o a bloquear España”. - DNA