barcelona - El último barómetro del Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) de la Generalitat dado a conocer ayer refleja una nueva caída de las tendencias soberanistas en Catalunya. Un 48,5% de los ciudadanos se muestra contrario a romper amarras con el Estado y un 44,3% lo defiende, lo que contrasta con el empate técnico experimentado en la anterior oleada de diciembre. El estudio demoscópico también arroja que el independentismo perdería fuelle en el Parlament, ya que Junts pel Sí (JxSi) y la CUP verían peligrar su actual mayoría absoluta.

A la pregunta de si apoyarían la celebración de un referéndum, un 50,3% de los catalanes se muestra partidario de organizarlo aunque fuera sin haber conseguido antes el beneplácito del Estado. Más de un 73% de ellos participaría con su voto si la Generalitat lograra colocar las urnas. Por su parte otro 23,3% otorga su apoyo al plebiscito, aunque solo en caso de que fuera consensuado con el Gobierno español. Y, por último, un 22,7% de los ciudadanos aboga por no llevarlo a cabo bajo ninguno de estos dos conceptos.

Pese a que JxSí volvería a resultar vencedor en unas elecciones, las formaciones nacionalistas podrían experimentar un ligero retroceso con respecto a sus posiciones actuales. Pasarían de sus 62 escaños en el Parlament a una horquilla de 58 o 60. La CUP también caería, aunque en menor medida, no en vano lograrían reeditar 8 de sus 10 asientos. El barómetro, asimismo, apuntala la segunda posición de Ciutadans -con 20-21 parlamentarios-, el crecimiento de Catalunya Sí Que Es Pot -18 o 19- y el estancamientos del PSC -de 15 a 16- y el PP -13-.

La encuesta arroja datos sobre la correlación de fuerzas en el seno de JxSí, que es la formación que mayor fidelidad de voto dispone. Y destaca que ERC obtendría una amplia ventaja sobre PDeCAT si hubiera elecciones generales. Obtendría de 12 a 14 escaños en el Congreso, frente a los 5-6 de la antigua CDC, que perdería hasta tres representantes en Madrid. - I.F.

Rechazo, al alza. La adhesión al referéndum ha fluctuado durante los últimos años, aunque los contrarios a la independencia han ido ganando terreno durante los tres últimos barómetros del CEO. Pasan del 45,1% de diciembre al 48,5% actual, cuando en junio de 2016 se situaban en el 42,4%, cinco puntos por debajo de los partidarios.

El vicepresidente y líder de ERC obtiene una nota de 5,58 sobre 10, por delante del president Puigdemont (con 5,28). Rajoy es el peor valorado (1,82).