jaén - En un ambiente ya claramente de precampaña de cara a asaltar el liderazgo del PSOE, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, protagonizó ayer su primer mitin en una de las plazas fuertes del partido, Jaén. Sin postularse claramente a la secretaría general, el multitudinario acto supuso una demostración de fuerza y una etapa más a la hora de seguir recabando apoyos. Así, tras el respaldo que le ha transmitido en los últimos meses el expresidente del Gobierno español Felipe González, ayer fue otro antiguo inquilino de Moncloa, José Luis Rodríguez Zapatero, el que ejerció de escudero.
El décimo aniversario de la Ley de Dependencia fue la excusa e hilo argumental para convocar el mitin y desgranar en su transcurso toda una serie de hitos del socialismo. “El orgullo de ser socialista” fue, precisamente, el mantra de un cónclave diseñado para tratar de superar el conflicto interno e insuflar nuevas fuerzas de cara a la renovación del partido. “Queremos al PSOE y sentimos orgullo porque es libertad, dignidad, igualdad, justicia. Hay quien no tiene historia y por eso no lo interesa, otros que prefieren que la historia se olvide. Pero nosotros estamos orgullosos de dónde venimos”, defendió Díaz.
También reconoció “errores” en el camino, pero animó a los asistentes recordándoles que el partido “no está tan mal”. “El PSOE gana no cuando se mira en el espejo, sino cuando se mira en los ojos de los ciudadanos”, remachó. Frente a las prisas que demuestran los críticos para celebrar cuanto antes el Congreso Federal en el que se renueve el mensaje, dirección y liderazgo de la formación, la Gestora que rige actualmente su destino aboga por dejar dicha cita para antes del verano. A este respecto, Susana Díaz se refirió ayer a ese Congreso como “un punto de inflexión para cambiar y para ganar”. De cara al mismo pidió “unidad y fraternidad”, pero apostilló que para mover la nave en esta travesía es necesario “tener las ideas claras”. “Ningún viento es bueno, si no sabe dónde le lleva. Por eso lo vamos a hacer bien”, sentenció.
Guerra de nervios Tan solo un día antes, los críticos celebraron un acto en Sevilla en el que uno de sus dirigentes más destacados, el diputado Odón Elorza, cargó duramente contra el sector oficial afirmando que “la Gestora es, fundamentalmente, Susana Díaz”. Precisamente, la presidenta andaluza convocó el acto de ayer en Jaén después de que el ex secretario general, Pedro Sánchez, reapareciera en un acto en Xirivella (Valencia) reclamando la convocatoria del Congreso Federal que elegirá a su sucesor. Sánchez celebró otro acto el pasado sábado en Asturias en su intento de no caer en el olvido en esta guerra de nervios en la que nadie se postula de forma evidente y todos siguen mirándose fijamente a los ojos.