Bilbao - La candidata a lehendakari de Elkarrekin Podemos, Pili Zabala abogó ayer en un acto en Galdakao por entablar “pactos puntuales en materias importantes como política social, empleo o modelo territorial” durante la próxima legislatura en lugar de abrazar del acuerdo más global que EH Bildu apuesta diseñar junto a la coalición y el PNV. Zabala salió al paso de la invitación que Otegi ha venido lanzando, ya que esa propuesta para una acción conjunta a tres bandas no ofrecería “garantías de avance social y democrático. Del 25-S va a salir un Parlamento plural que va a exigir pactos entre diferentes. Para avanzar social y democráticamente se puede contar con nosotros”, reseñó, pero ello no supondrá certificar acuerdos maximalistas.
Elkarrekin Podemos ya había rehusado el llamamiento efectuado por distintos responsables de EH Bildu que incluso apelaban al espíritu con el que se diseñó el pacto que desbancó a UPN del Gobierno de Nafarroa como método propicio, aunque tampoco se rechazara hacerlo desde un prisma más rupturista con el modelo territorial como acontece en Catalunya. Anteayer mismo fueron dos de los miembros de la dirección en suelo vasco quienes lo hicieron. Ni el secretario político Eduardo Maura ni el secretario de Organización Lander Martínez lo ven con buenos ojos, ya que no serviría “para poner en el centro las cuestiones sociales y económicas”. Zabala copió el argumento para adelantar que antepondrán los pactos puntuales a otras formas de proceder cuando se abra el nuevo Parlamento vasco.
Lo cierto es que la política de pactos está capitalizando un final de campaña en el que los partidos suelen reorientar los mensajes y los destinatarios a los que los que se dirigen. Fue el caso de Elkarrekin Podemos, que calificó a Araba como “la palanca de cambio” que permitirá llevar “aire fresco” a Euskadi. Es en ese territorio, en el que Podemos ha obtenido dos contundentes victorias en las últimas citas electorales pero parece sufrir un retroceso frente al PNV, donde la coalición centró ayer sus esfuerzos de la mano de un Iñigo Errejón que resumió, nuevamente, la oferta de la formación. Buscan “un nuevo acuerdo de país” con el “blindaje” de los derechos sociales, el avance en el autogobierno y el desarrollo de un marco de convivencia “que garantice un escenario de paz y superación”.
El secretario de política de Podemos estuvo en un paseo por Amurrio, en el que recordó “que la gente sencilla puede dar la vuelta a las elecciones y equilibrar la balanza con los poderosos”. Y es que si presentan su candidatura al 25-S no lo harán para “sacar al PNV de las instituciones”, a pesar de que Urkullu utilice ese argumento “como si fuera un pecado”. Lo hacen para que “haya cambio” ante los que llevan demasiados años instalados en el apoltronamiento”.