El Cairo - Los bombardeos de la aviación rusa causaron ayer una treintena de muertos en la ciudad siria de Al Raqa, mientras que en Alepo continuaron los ataques y los combates entre los rebeldes y las tropas gubernamentales, pese a la tregua de tres horas anunciada por Moscú.

Al menos treinta personas murieron, entre ellas veinticuatro civiles, y setenta resultaron heridas en los ataques de los aviones rusos en Al Raqa y sus alrededores, en el noreste de Siria y feudo del grupo yihadista Estado Islámico (EI). Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que calificó lo ocurrido de “masacre”, la mayoría de los heridos se encuentra en estado grave, entre ellos quince que perdieron alguna extremidad u otras partes del cuerpo.

Los bombardeos fueron efectuados de forma simultánea en los alrededores de la sede de la Seguridad del Estado, ubicada en el centro de la ciudad, y en la zona de Al Farusía y su planta de agua, en el norte.

La versión dada por el Ministerio de Defensa ruso es distinta. Moscú anunció que seis bombarderos estratégicos Tu-22M3 de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas atacaron posiciones del EI. Detalló que se destruyó un gran arsenal con armamento, munición y combustibles cerca de Al Raqa, un fábrica de cargamento para armas químicas en el noroeste de la ciudad y un gran campamento de entrenamiento de terroristas.

Se trata del segundo ataque con aviación estratégica en los últimos tres días de Rusia, que interviene en el conflicto sirio desde septiembre pasado en apoyo del régimen de Damasco. Rusia empezó a emplear estos aviones hace un mes, después de que los yihadistas derribaran dos de sus helicópteros en el norte de Siria.

“No hay señales de ninguna tregua”, dijo a Efe por teléfono el vecino y activista de Alepo Mohamed Jaled. En este sentido, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) se mostró gravemente preocupado por el “estremecedor menosprecio” de los participantes en el conflicto sirio por la seguridad de la población civil, en especial debido a la gravedad de la situación humanitaria en Alepo y los ataques de los últimos días en Idlib, declaró a Europa Press.

gas cloro Activistas sirios denunciaron ayer un nuevo ataque con gas cloro perpetrado supuestamente por las fuerzas del régimen de Bachar al Asad en un barrio de la ciudad de Alepo (norte del país) y que causó al menos tres muertos. Mohamed Jaled aseguró que una mujer y dos niños de una misma familia murieron anteanoche y otras 50 personas sufrieron síntomas de asfixia por un ataque con gas cloro en Al Zabdiya, al sur de Alepo. Entretanto, el EI perdía ayer control en Sirte (Libia).