alicante - Venezuela vuelve a ser foco de interés en la campaña electoral española. En este caso, por la presunta financiación por valor de más de 7 millones de euros por parte del régimen chavista del Centro de Estudios Políticos y Sociales (CEPS), fundación de la que salieron las principales cabezas pensantes de Podemos. Si bien hasta la fecha las acusaciones habían partido desde el propio Estado, en este caso fue la Asamblea Nacional del país sudamericano la que dio a conocer que investiga la financiación del germen de una formación morada que se ha visto obligada a defenderse, otra vez más, de la emisión de pagos irregulares por parte del Ejecutivo de Hugo Chávez para engordar las arcas de la entidad. Fue el caso del secretario de Organización, Pablo Echenique, que ayer recordó que los tribunales españoles “por cinco veces han dicho” que las acusaciones de que el Gobierno venezolano ha financiado al partido “son mentira”.

“Confiamos en la justicia de nuestro país y nos gustaría que las demás fuerzas políticas también confiasen y respetasen a los tribunales españoles”, asintió Echenique, quién remarcó que “ese tipo de calumnias que vienen de lugares tan poco éticos como Manos Limpias son mentira y no tienen fundamentos jurídicos”. Lo cierto es que la Comisión Permanente de Contraloría de la Asamblea Nacional de Venezuela, controlada en la actualidad por el bando opositor, ha anunciado que investigará una “presunta financiación” al CEPS por unas supuestas labores de asesoría, apoyo técnico y programas de formación realizados de 2003 a 2011. Varios medios apuntaron que investigará a los dirigentes de Podemos Juan Carlos Monedero, Pablo Iglesias y Jorge Verstrynge, junto al exministro de Finanzas venezolano Rafael Isea y el difunto expresidente Chávez. - DNA