Incrementar el número de mujeres en la plantilla de la Ertzain-tza ha sido uno de los principales anhelos del Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco, del actual y de los anteriores, cuando aún se denominaba de Interior. Tras los sucesivos varapalos judiciales que ha sufrido la reserva de cuotas en las promociones de la Policía vasca para agentes femeninas -el TSJPV anuló en 2011 la reserva de la mitad de las plazas-, la quinta modificación de la Ley de Policía del País Vasco, aprobada ayer por el Consejo de Gobierno, contempla medidas concretas que, esta vez sí, posibilitarían el objetivo explicitado por la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia: que el actual porcentaje del 11% de mujeres ertzainas se eleve hasta el 33%.

Para ello, será necesario que exista “voluntad política” entre los grupos con representación parlamentaria para aprobar esta ley antes de que la legislatura concluya, previsiblemente el próximo octubre, tal y como afirmó la consejera en una rueda de prensa. La nueva ley contempla que en cada promoción, tanto de acceso a la Ertzaintza y las policías locales como interna para promocionarse dentro del cuerpo, se aprobarán planes específicos de discriminación o acción positiva de las mujeres. Todo ello para garantizar la igualdad de oportunidades en el ingreso y carrera profesional, corregir su infrarrepresentación e incrementar la eficacia policial. Estas medidas se llevarán además a cabo “siempre dentro de los parámetros y requisitos de la legislación y jurisprudencia europeas, para incrementar su presencia actual”.

Para ello, se establecen medidas de acción positiva a favor de las mujeres en procedimientos selectivos por turno libre que implican la preferencia de la candidata mujer frente al hombre, en determinadas circunstancias, “de un modo compatible con los parámetros exigibles en la jurisprudencias comunitaria europea de previsión legal, proporcionalidad y razonabilidad”. No obstante, Beltrán de Heredia recalcó que para garantizar que las mujeres que resulten elegidas en una OPE tengan la capacitación apropiada, la diferencia de puntuación con el hombre al que puedan relegar en cada promoción no podrá superar el 15 %.

La reforma de la Ley de Policía del País Vasco, aprobada casi un año después del plazo inicialmente fijado en el calendario legislativo, tiene como objetivo regular por ley el reforzamiento del nuevo modelo policial vigente en Euskadi, la promoción de medidas igualitarias y la mejora de la carrera profesional en la Ertzaintza. Para ello, se plantea la integración del Código Europeo de Ética de la Policía, potenciar el sistema de estímulos positivos del buen hacer policial -condecoraciones y distinciones- y la modificación del actual sistema disciplinario.

Según la consejera de Seguridad, con este proyecto el Gobierno busca configurar un modelo de Policía basado en “la prestación de servicio a la ciudadanía y la imbricación de los servicios policiales con una sociedad abierta, plural, bilingüe y constituida por hombres y mujeres iguales en derechos”.

Incidentes Otro de los aspectos destacados de la Ley es la creación de una Comisión de Buenas Prácticas de la Policía del País Vasco, un organismo de carácter permanente, con autonomía funcional respecto de la institución policial y compuesto por expertos. Esta comisión se encargará de estudiar, a solicitud de los órganos competentes, cualquier conducta o práctica en el seno de la Ertzain-tza o la Policía local sobre las que existan quejas e “incidencia en la confianza ciudadana”. Además, analizará de oficio los incidentes en los que, en el contexto de una intervención policial, se pueda producir la muerte o lesiones graves a alguna persona. Beltrán de Heredia desvinculó la propuesta de crear esta comisión del caso Cabacas, en el que un joven falleció en abril de 2012 por el impacto de una pelota de goma disparada por la Ertzaintza.

Por otro lado, ELA pidió ayer que la convocatoria de la 26º promoción de la Ertzaintza exija la acreditación del perfil 1 de euskera en sus 250 plazas, y no solo en la mitad.

Promoción interna. Se favorece la carrera administrativa al disminuir el número de años de servicio para ascender de categoría. También desaparece el rango de superintendente, de modo que se agiliza el acceso y cobertura de los puestos de mando de mayor responsabilidad.

Régimen disciplinario. Incorpora nuevas faltas muy graves en materia de acoso sexual y acoso laboral reiterado, así como infracciones al régimen de utilización de videocámaras policiales.

Policía local. Prevé que estos agentes actúen fuera del término municipal que les corresponde para ejercer funciones de protección de autoridades locales.

Arkaute. Se configura como órgano permanente de selección y se amplía a las policías locales.