iruñea - Tras el tumultuoso mandato de Yolanda Barcina, UPN afronta su décimo congreso con relativa paz interna. Como novedad, a partir de ahora las bases elegirán mediante primarias al candidato al Gobierno navarro y los aspirantes al Congreso y al Senado. El consejo político aprobó ayer las tres ponencias a debate sin voces críticas. Un debate que se prolongó durante cuatro horas por cuestiones más de protagonismo personal de algunos militantes que de diferencias de fondo, lo que augura una cita tranquila, alejada del enfrentamiento y la división de los dos últimos precedentes. Superado el trámite ideológico y estatutario, los regionalistas abren ahora el de los nombres, que siempre despierta alguna tensión interna. Lógico por otra parte en un partido que elige de forma directa, mediante el sufragio de todos sus afiliados, a su presidente, vicepresidente, secretario general, miembros de la ejecutiva y consejo político. Entre el martes y el viernes quienes lo deseen podrán dar su nombre para ser sometido a votación el 24 de abril, sin que se esperen aspirantes alternativos a Javier Esparza para el liderazgo. No al menos con capacidad de competir por la presidencia.
Los focos apuntan así a la vicepresidencia, secretaría general y ejecutiva, donde el exalcalde de Aoiz intentará hacer un equipo de confianza, renovado pero que integre a las diferentes familias, menos enfrentadas que hace unos años pero todavía agrupadas entre quienes apoyaron a Alberto Catalán y quienes fueron la camarilla de Yolanda Barcina. - I. F.
