vitoria - El propio Alfredo de Miguel quiso ayer salir a la palestra para defender su “absoluta inocencia” afirmando rotundo que no hay “ni una sola prueba” en el sumario que demuestre el enriquecimiento de los encausados.
En un comunicado, De Miguel asegura que “la cadena de elucubraciones gratuitas en que consiste la supuesta relación de hechos” y las “desorbitadas peticiones de penas y fianzas realizadas por la Fiscalía” no son más que “un nuevo giro de tuerca en una estrategia perversa que se inició hace ya más de seis años”.
Quien fuera número dos de la Diputación foral alavesa reitera que aunque se prescindiera de las “infracciones procesales y vulneración de derechos que han tenido lugar en este proceso”, no existe “ni una sola prueba en el sumario que demuestre el enriquecimiento personal ni colectivo de ninguna de las personas encausadas”. “Si se acusa de haber formado una trama para cobrar comisiones ilegales, lo mínimo es señalar dónde está el dinero supuestamente recaudado”. “No es difícil fabular” ni “construir relatos a base de deformar la realidad de las cosas y apartar todo lo que no conviene” como los “documentos y datos aportados por las defensas” para “acomodar todo ello a la historia que se tiene preconcebida”, lamenta, antes de confiar en que “a nada que se respeten las garantías y reglas del proceso penal”, la Justicia acabe demostrando “quién elucubra y quién no, quién no ha actuado conforme a la legalidad y quién sí”. - Efe