GASTEIZ - Existe un consenso bastante amplio sobre la idea de que todas las víctimas deben ser reparadas, hayan sufrido por la violencia de ETA, los GAL o los abusos policiales. El problema estalla cuando se habla de realizar homenajes conjuntos a todas las víctimas, porque algunos sectores temen que puedan taparse unas violencias con otras o, incluso, justificarse la violencia de ETA esgrimiendo la que practicó el franquismo o los abusos por parte del Estado ya en periodo democrático. Ese argumento lo ha enarbolado el PP para desmarcarse del Día de la Memoria desde que esa jornada incorpora a las víctimas de abusos policiales. Ese 10 de noviembre, próximo martes, se da por sentado que volverá a ausentarse. El Gobierno Vasco, no obstante, tiene claro que debe recordarse a todas las víctimas. Cuando aprobó las líneas de actuación del Instituto de la Memoria que recuerda a las víctimas del franquismo, el terrorismo y los contraterrorismos ilícitos, aclaró que promovería una reflexión crítica y autónoma de cada una de las violencias, sin admitir justificaciones. Ese principio se plasmará organizando el próximo año tres homenajes diferenciados para víctimas del franquismo, el terrorismo y los abusos policiales.
El encargado de verbalizar la apuesta fue el secretario de Paz y Convivencia, Jonan Fernández, durante la presentación del proyecto de Presupuestos de Lehendakari-tza para el próximo año, que asciende a 111 millones (6,1 para la Dirección de Víctimas, y 1,5 para el Instituto de la Memoria). En realidad, el Gobierno Vasco ya ha celebrado este año un acto individualizado para las víctimas del terrorismo (ETA, GAL y BVE), a pesar de que algunas voces sigan reivindicando que el Día de la Memoria se centre solo en ellas. El acto tuvo lugar en junio, cuando el lehendakari organizó una recepción con víctimas y pidió perdón públicamente por la desatención institucional, un gesto valorado por la AVT, hasta esa fecha alejada de los planteamientos de paz de los jeltzales. Lakua no quiere que ese encuentro sea una mera anécdota o un hecho aislado y pretende darle continuidad el próximo año con otro acto de reconocimiento dedicado en exclusiva a las víctimas del terrorismo.
También habrá un acto específico para las víctimas de abusos policiales. El Gobierno Vasco espera trasladar la próxima semana a los grupos del Parlamento el borrador del proyecto de ley de reconocimiento y reparación en ese ámbito para aprobarlo antes de que acabe la legislatura y, cuando sea ratificado, se convocará ese acto.
En realidad ya existe un decreto que sirve para reparar a esas víctimas, pero solo abarca desde 1960 hasta 1978, y además fue recurrido por el Estado y los jueces dictaminaron que el Ejecutivo vasco había relajado los criterios para acreditar las vulneraciones de derechos, ya que no exigía informes de la Seguridad Social. El Gobierno Vasco cree que la ley será más fuerte que el decreto porque tendrá detrás un amplio apoyo parlamentario, y abarcará además desde 1960 hasta la actualidad, incluyendo las torturas.
Las víctimas del franquismo también serán recordadas en un acto individualizado, una medida ya anunciada cuando el lehendakari lanzó el plan de prioridades sobre memoria histórica. Las fuentes consultadas por este periódico no avanzan ninguna fecha para celebrar los actos. De momento están en fase de proyecto, deben diseñarse los eventos y, entre otros puntos, decidir si tienen vocación de continuidad y se celebrarán en fechas fijas todos los años, una decisión para la que sería necesario tejer consensos. En paralelo, se mantendrá el Día de la Memoria conjunto, según ha podido saber este diario.
Proyectos Fernández anunció ayer que el Gobierno Vasco encara el último tramo de la legislatura con un planteamiento “ambicioso”, con el propósito de encargar nuevos estudios sobre la situación de las víctimas de las décadas de los 70 y 80 porque sufrieron “un especial abandono”, y profundizando en los heridos y los secuestrados. Además, espera que una veintena de presos y expresos de ETA participen en el programa Hitzeman y aporten propuestas para avanzar en la reinserción. También se dará forma el próximo año al columbario donde reposarán con mayor dignidad los asesinados por el franquismo que no han podido ser identificados.
El Ejecutivo vasco sigue buscando la tecla para propiciar el mayor consenso en el nuevo tiempo sin violencia tras haber presentado el Plan de Paz y Convivencia, criticado por toda la oposición.