MADRID- La Abogacía del Estado pidió el pasado 6 de julio que se retirase la ikurriña colocada en el Ayuntamiento de Iruñea durante el txuipinazo de los Sanfermines 2015, según un auto conocido ayer. No obstante, el titular del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Iruñea consideró que no cabía adoptar la medida cautelar reclamada porque la bandera del Estado ocupaba el “ lugar de honor”, esto es, en el centro.

La decisión del juez estuvo basada en el artículo 6.1 de la ley 39/1981 en la que se regula el uso de la bandera de España y de otras banderas y enseñas. Según esta norma, la bandera española debe ocupar siempre un lugar destacado y el tamaño del resto de las banderas empleadas en actos públicos no debe ser superior a la del Estado. El juez reconoció que en el balcón del Ayuntamiento de Iruñea la colocación de las insignias era correcta -se colocaron cinco banderas, la europea, la navarra, la española, la ikurriña y la de Iruñea por este orden-. El Tribunal Superior de Justicia de Nafarroa señaló que en el escrito de solicitud, en condición de medida cautelar, el recurrente consideró procedente la suspensión solicitada ya que la ejecución del acto impugnado -la colocación de bandera de la Comunidad Autónoma Vasca- haría perder su finalidad legítima al recurso. Según consta en la resolución, las medidas cautelares tienen por objeto asegurar la efectividad de la sentencia, es decir, evitar el riesgo de que una vez llevado a cabo el acto impugnado ya no tenga sentido el procedimiento judicial. Al respecto, el magistrado razona en su resolución que la apreciación de una situación de riesgo en cuanto a la preservación del objeto litigioso no determina por sí mismo la conveniencia de adoptar tales medidas cautelares. Así, prosigue el juez, habrá que ponderar y valorar los intereses en conflicto y sus consecuencias.

polémica La colocación de la ikurriña en el Ayuntamiento fue un símbolo de cambio propulsado por el nuevo Gobierno de la ciudad liderado por EHBildu. El alcalde de Iruñea, Joseba Asiron, aseguró además que las banderas que colgaban de los mástiles del consistorio “representaban de esa manera a un sector mucho más amplio de la sociedad” Al mismo tiempo, la portavoz de Geroa Bai en el municipio, Itziar Gómez, admitió el día del txupinazo que la implantación de la ikurriña es un debate que no corre prisa y que necesita sus ritmos para adecuarse a la sociedad, pero que lo realmente importante fue “la emoción de las personas de Iruñea”. El Gobierno español lo criticó duramente.