gasteiz - El Gobierno Vasco no ha tardado en dar respuesta a la propuesta de paz expuesta el fin de semana por EH Bildu para la resolución y el final de la violencia en Euskadi. El Ejecutivo de Gasteiz reclama a la izquierda abertzale pasos concretos y no palabras como prueba de que sus planteamientos van más allá del contexto electoral en el que estos han sido presentados.

El pasado domingo la coalición abertzale presentó el documento Vía Vasca para la Paz en la que, de una manera muy genérica y sin mucho detalle, expone sus propuestas en materia de política penitenciaria, retorno de los huidos, víctimas y memoria, y desarme y desmilitarización.

En un comunicado emitido ayer, el Gobierno Vasco emplaza a la izquierda abertzale a avanzar “con hechos e iniciativas tangibles, no solo con palabras” para dar contenido real a sus manifestaciones públicas. “Hacerlo está en manos de la propia Sortu y EH Bildu”, asevera tras subrayar que conoce “perfectamente” las circunstancias de la Conferencia y Declaración de Aiete del 17 de octubre del 2011, así como, particularmente durante esta legislatura autonómica, todos los documentos y pronunciamientos de ETA, pronunciamientos de agentes internacionales, en especial de la Comisión Internacional de Verificación, y pronunciamientos del Foro Social y de la propia Sortu.

El Ejecutivo de Urkullu vuelve a remitir a la izquierda abertzale a la Ponencia parlamentaria de Paz y Convivencia como depositaria de las propuestas en esta materia para su posterior debate. En este sentido, invita a EH Bildu a que “dé los pasos necesarios para desbloquear” este foro y “contribuya” a propiciar los máximos consensos posibles. En la actualidad, la Ponencia de Paz está atascada desde hace un año tras la salida de la misma del PP y PSE ante la negativa de la coalición abertzale a suscribir el denominado suelo ético, base ética mínima para deslegitimar la violencia de ETA en las últimas décadas.

El Ejecutivo de Urkullu subraya que durante estos dos últimos años ha puesto en marcha, desde la Secretaría que lidera Jonan Fernández, todas las iniciativas del Plan de Paz y Convivencia con una visión “amplia e integradora”, ya en relación a la clarificación del pasado, como del trabajo del presente para la construcción de la convivencia necesaria en Euskadi. “Esta es una herramienta puesta a disposición de un trabajo compartido”, destaca. Por último, insiste en subrayar la relevancia del momento en una cuestión “tan sensible” para el futuro de Euskadi. “Se trata de sumar, de propiciar el máximo consenso y acuerdo. Para ello, es necesario asumir compromisos claros y concretos y fijarlos en un calendario”, apostilla.

Previamente a la publicación de la nota, el presidente de Sortu y parlamentario de EH Bildu en la Cámara de Gasteiz, Hasier Arraiz, abogó por la participación de los Ejecutivos de la CAV y Nafarroa en una comisión para poner fuera de uso los arsenales de ETA, uno de los puntos del documento Vía Vasca para la Paz. La coalición aber-tzale considera que “en esa tarea es de suma importancia dar a dicha iniciativa la máxima cobertura y legitimidad política, institucional y social.

La izquierda abertzale descalificó el pasado año la propuesta para el desarme presentada el 21 de diciembre por el Gobierno Vasco en la que se detallaban las bases para un desarme “rápido, viable y efectivo, basado en un gesto unilateral de ETA ante la sociedad vasca y con cobertura social, internacional e institucional”. Entre otras iniciativas, la propuesta planteaba la creación de un Comité para el Desarme, compuesto por una representación del Foro Social, de los verificadores internacionales, de los agentes y facilitadores internacionales y de representantes del Ejecutivo de Gasteiz.

presos y desarme En su propuesta actual, EH Bildu propone crear una Comisión Independiente de Desarme junto con la participación de “organizaciones facilitadoras internacionales”. Y añade que es “fundamental la participación constructiva, en sus niveles correspondientes, de los gobiernos de la Comunidad Autónoma Vasca y de la Comunidad Foral de Navarra”, así como de los partidos y agentes vascos.

En materia de presos, la propuesta de la izquierda abertzale aboga por la excarcelación condicional anticipada mediante planes individualizados y por medio de los cauces legales. Este proceso sería por “cauces legales” y tras un reconocimiento del “daño causado como consecuencia de su actuación”. Se trata de una medida ya recogida de alguna manera en la legislación penitenciaria vigente y que, además, viene reclamando el Gobierno vasco en su programa de apoyo legal a los procesos de resocialización Hitzeman en la que aboga por el “compromiso de las personas presas que asumen la responsabilidad del presente y el futuro, sobre la base de una reflexión crítica del pasado”. Y todo ello dentro del “marco constitucional y la legalidad penitenciaria ordinaria”.

Desarme. Plantea un sellado verificado de las armas y crear una Comisión Independiente de Desarme y la participación de facilitadores internacionales

Presos. Acabar con el alejamiento y trasladar a los presos a las cárceles de Iruñea y Zaballa. Excarcelación condicional anticipada con planes individualizados y legales.

Víctimas. Se creará una Comisión de la Verdad compartiendo los diferentes sufrimientos.