MADRID. En declaraciones en el Congreso y en entrevistas radiofónicas, Pujalte ha precisado que cobró una iguala de 5.000 euros al mes, de la que luego había que deducir gastos, como "ayudante del señor Armero" en el proceso de reestructuración y desapalancamiento de la compañía, mediante "conversaciones" y "estudio de documentos" que él le pasaba.

El contrato, ha dicho, se prolongó "un año largo" y cuando Armero se fue su contrato se acabó. Pujalte ha confirmado así la información que publica sobre él el diario 'El País', que cifra el monto total del contrato en 75.000 euros.

"Nada de lo que aparece en los medios es distinto ni se contradice con mi marco de compatibilidad en el congreso para el ejercicio de mi actividad como economista, ni en mi declaración de renta --ha remarcado--. Tengo todo absolutamente regular, tuve pedida".

¿ÉTICO? ES LEGAL Preguntado si le parece ético haber cobrado de esta empresa mientras era diputado, ha recordado que tenía permiso del Congreso para compatibilizar el escaño con ser "economista ejerciente sin ninguna relación laboral con la Administración Pública, ni empresas publicas" y que su consultora, conforme a la ley, no ha tenido ninguna relación con el sector público. "Me parece legal --ha zanjado--. El marco legal es el existente y yo he cumplido con mis obligaciones en el Congreso y con Hacienda.

Según ha recordado, siempre ha ejercido el "pluriempleo" en su vida profesional y, estando en el Congreso, tuvo autorizada la compatibilidad para ejercer actividades extraparlamentarias hasta el año 2000, cuando renuncia a ellas tras ser nombrado portavoz económico del Grupo Popular, y las retomó en 2008, cuando dejó ese puesto con la llegada de Soraya Sáenz de Santamaría a la dirección parlamentaria del PP.

Eso sí, ha insistido en que esta actividad extraparlamentaria ha sido siempre "residual", compatible y autorizada por el Pleno del Congreso, y que consta en sus declaraciones de renta regularmente: "Todo bien, todo regular, y por tanto no tengo nada que negar de ninguna afirmación de lo aparecido".

Su labor de asesoramiento con la constructora se limitaba a Mario Armero, quien le pidió ayuda para prestar asesoramiento económico "en su toma de decisiones" en campos de campos de reestructuración empresarial y de la deuda. Le pasaban papeles y emitía su opinión, a veces por escrito y a veces verbalmente. Le abonaban 5.000 euros al mes.

NUNCA ACOMPAÑÓ AL CONSEJERO DELEGADO En todo caso, ha querido dejar claro que su labor se quedaba en el segundo plano: "Nunca jamás acompañé al señor Armero a ninguna visita pública ni privada, nunca participé en un proceso comercial de la compañía ni público ni privado y nunca representé a la empresa", se ha defendido el diputado.

Pujalte se siente orgulloso de su labor como asesor económico con este grupo empresarial: "Me siento satisfecho con el trabajo que hice porque la empresa ha ido bien y hoy es solvente --ha comentado--. Ha superado la crisis y sigue contratando trabajadores. Seguro que no es por mi aportación, será por la de todos los que en 30 años han aportado su trabajo. Yo aporte mi granito de arena ese año".

Por último, ha negado que Hacienda haya descubierto este caso, que está en sus declaraciones de bienes y actividades, e incluso ha puestos sus declaraciones de IRPF a disposición de los medios. Tampoco tiene constancia de estar siendo investigado por la Agencia Tributaria: "A mí Hacienda no se ha dirigido para nada ni me ha dicho nada", subraya.