gasteiz - Los votos de seis parlamentarios socialistas propiciarán que el Gobierno de Iñigo Urkullu saque adelante hoy las Cuentas de 2015, teñidas de un marcado carácter social, dado que el 75% del total del Presupuesto, que asciende a 10.639 millones de euros -un 4,1% mayor que el aprobado en 2014, es decir, 423,5 millones más-, se destina a este capítulo en el que se engloban servicios sanitarios, educativos y sociales, entre otros, mientras que la partida destinada a la RGI y a la Prestación Complementaria de Vivienda (PCV) ascenderá a 461 millones de euros, creciendo el 19,9% respecto al de este año. La reedición del acuerdo entre PNV y PSE no incluye esta vez al PP, lo que ha obligado a la formación que lidera Idoia Mendia a ceder seis escaños para garantizar el visto bueno al proyecto, amén de haber pactado partidas del ámbito social por valor de 35 millones vía enmiendas parciales, que se suman a los 150 millones adicionales relacionados con este mismo apartado incorporados al proyecto original del Presupuesto.
Los 27 parlamentarios jeltzales y los seis socialistas sumarán 33 votos favorables, frente a los 32 contrarios de EH Bildu, PP y UPyD. El pleno de la Cámara vasca rechazó el pasado día 11 la petición de la coalición soberanista y del partido encabezado por Gorka Maneiro de devolver al Ejecutivo de Urkullu el proyecto, en tanto que EH Bildu consideraba que estas Cuentas “amplían la brecha social, creando dos sociedades divididas por un precipicio que cada vez es más profundo”, mientras que la formación magenta sostiene que “consolidan los recortes sociales, y no sirven para crear empleo digno y de calidad”.
Y es que mientras EH Bildu, por boca de Hasier Arraiz, acusaba al PNV de hacer “seguidismo de las políticas económicas del Estado español que impiden a Euskadi salir de la crisis”, desoyendo la “voluntad política” de la coalición soberanista”; desde el PNV, su portavoz Joseba Egibar replicó que su partido no va a “meter nunca” a Euskadi en “caminos sin salida”, lamentando que EH Bildu no esté por la labor de acordar con nadie y en ningún sitio, entre ellos, la Diputación de Gipuzkoa.
Desde el PP esgrimieron que el PNV actúa de forma “partidista”, ya que tiene “la visión puesta en las elecciones” municipales, forales y generales, además de estimar que el Presupuesto no tiene entre sus “prioridades” el impulso a la reactivación económica y la creación de empleo. Además, la relación entre populares y jeltzales no atraviesa por su mejor momento.
evitar la prórroga El PSE justificó su decisión de avalar las Cuentas para “evitar una prórroga con menos ayudas de emergencia social y a la conciliación, sin programas para parados de larga duración procedentes de la construcción o con menos recursos para planes comarcales de empleo”. “No vamos a permitir que los mayores recursos derivados de la reforma fiscal que promovimos no se reflejen en las necesidades de los ciudadanos”, puntualizaron. Por su parte, el consejero vasco de Hacienda y Finanzas del Gobierno vasco, Ricardo Gatzagaetxebarria, se congratuló de que las Cuentas se ubiquen en un modelo económico que es el del “desarrollo humano sostenible”, primando “el conocimiento y la formación”, además de la “cohesión e integración y la sostenibilidad”.