gasteiz - La longevidad del terrorismo en Euskadi no impide que para los quinceañeros de hoy en día ETA les suene a “una cosa antigua” que vinculan a los tiempos de sus padres y no al que a ellos les ha tocada vivir, pese a que el último asesinato de la banda armada tuviera lugar hace apenas cinco años.
Esta es una de las conclusiones que el secretario general de Paz y Convivencia, Jonan Fernández, extrae de las reflexiones de los alumnos que han tenido la oportunidad de escuchar los testimonios de las víctimas en primera persona. Algunos de estos jóvenes aportan, a través de vídeos grabados con sus propios móviles, su punto de vista tras tomar parte en el programa Adi-adian. Estas proyecciones acompañaron ayer el balance anual a cargo del Gobierno Vasco, imágenes en las que los estudiantes mostraron el grado de comprensión o empatía que la experiencia les ha generado.
“Me ha ayudado para darme cuenta de la realidad de otras personas”, “hemos aprendido con las víctimas” o “ahora sé de qué estamos hablando” son algunas de estas reflexiones en voz alta que recoge la proyección de los alumnos de cuarto de la ESO y Bachiller.
En este sentido, Fernández describió que lo que más destacan en general los alumnos es “el impacto” que les produce escuchar el sufrimiento que han padecido las víctimas y la “sorpresa” que les causa descubrir que pese a la pérdida del ser querido “no sientan odio”. “Muchos relatan que les ha servido para reflexionar sobre su propia vida”, añadió el secretario de Paz y Convivencia. - A.A.