BILBAO - Los vascos quieren pronunciarse sobre su estatus jurídico y político a través de una consulta. Y es que según el Euskobarómetro, una mayoría del 59% de ciudadanos está a favor de que se plantee en Euskadi un referendo sobre una posible independencia -apenas un 25% lo rechaza-, y en el que el voto se decantaría de salida por el sí en un 37% -sobre todo en Gipuzkoa, con un 46%- frente al 33% de sufragios en contra -mayormente en Araba, con un 44%-. La abstención alcanzaría el 14% y un 16% no mostraría preferencia. La diatriba se complica, como en Catalunya, cuando en el horizonte se coloca la posibilidad de quedar automáticamente fuera de la Unión Europea, de forma que el porcentaje de apoyo a la secesión descendería hasta el 32%, y al 28% si conllevara la pérdida del mercado español.

En cuanto a la identidad nacional subjetiva de los vascos, un 38% dice ser solo vasco, mientras que el 32% alberga una dualidad equilibrada entre su sentimiento vasquista y español, un 20% se declara más vasco que español, y apenas el 5% afirma ser más español que vasco. Consideraciones que son posibles ahora que el 54% de los ciudadanos se siente con libertad para hablar de política con todo el mundo, un 33% asegura hacerlo de forma selectiva con algunos y un 12% señala no poder hacerlo con nadie. Además, un 78% de personas subraya no tener miedo a participar en política, mientras que un 20% sigue acusando el “ miedo crónico en la sociedad vasca”, donde el 79% de la sociedad se declara “insatisfecha” con el funcionamiento de nuestro sistema democrático. Por otro lado, el 61% de los vascos se muestra optimista sobre la percepción de la disminución de la crispación social: un 34% constata en su entorno un aumento en este aspecto por la división y el enfrentamiento entre los partidos políticos, sobre todo en Gipuzkoa. - I. Santamaría