El PNV sigue trabajando para activar la ponencia parlamentaria que debata un nuevo estatus para Euskadi. El partido abrirá esta semana una ronda de contactos con los partidos vascos para dar forma a ese foro parlamentario. Las conversaciones serán discretas, y únicamente ha trascendido que los jeltzales se citarán el martes con el PSE y el jueves con el PP, aunque no se prevé que entren en detalles sobre la propuesta del nuevo estatus, sino que únicamente abordarían la conveniencia de activar una ponencia y los aspectos más técnicos para ponerla en marcha. En principio, ningún partido parece oponerse a participar en ella. La formación propone que cada grupo lleve su propuesta al foro parlamentario, ya que en esta ocasión la iniciativa no partirá del Gobierno vasco, al contrario de lo que sucediera con la propuesta del lehendakari Ibarretxe. No obstante, Urkullu ha matizado que, si los partidos quisieran que la propuesta partiera de Lakua, deberían pedirlo expresamente. El PNV aspira a lograr el máximo consenso, incorporando a los "dos extremos" -PP e izquierda abertzale- o, al menos, a uno de ellos. En cuanto a su propia propuesta, el PNV aboga por una relación bilateral, en pie de igualdad, con el Estado.
