ondarroa. El plazo finalizaba a las 00.00 horas de ayer día 30 de noviembre y el Ayuntamiento de Ondarroa, regido por Bildu, cumplió con el requerimiento de Carlos Urquijo, delegado del Gobierno español en la CAV. La bandera española apareció en las puertas de entrada de la Casa Consistorial del municipio vizcaíno. Eso sí, la enseña apenas duró unas horas en su emplazamiento porque en la jornada de ayer la pequeña bandera -similar a las que se colocan en las mesas de los despachos- ya había desaparecido.

En el pleno celebrado el pasado jueves, la alcaldesa de la localidad, Argia Ituarte, manifestó que se habían comprado dos banderas para cumplir con el requerimiento que les había realizado Urquijo. Según ha podido saber este periódico de fuentes próximas al Ayuntamiento, lo que sí tenían claro los regidores de Ondarroa era que la enseña española no se iba a colocar junto a la ikurriña, tal y como al final sucedió.

La colocación de la bandera española fue una de las acusaciones que se cernieron sobre Félix Aranbarri cuando el militante del PNV se hizo cargo de la gestora que rigió los designios de Ondarroa después de que los jueces españoles anularan la lista presentada por ANV. Entonces se acusó al militante jeltzale de plegarse al poder español por colocar la bandera en el Consistorio, cosa que ahora, aunque sea por requerimiento legal, ha hecho el gobierno municipal de Bildu.

Y es que desde que en enero de 2012 Carlos Urquijo llegó a la Delegación del Gobierno español en la CAV en sustitución del socialista Mikel Cabieces, una de sus principales fijaciones ha sido el cumplimiento de la ley 39/1981 que obliga a las instituciones a colocar la bandera española, bien sea en ayuntamientos o diputaciones. Los regidores que incumplan esta normativa se enfrentan incluso a la inhabilitación para ejercer cargos públicos.

En marzo de este año, la Delegación del Gobierno español había abierto un total de 104 expedientes contenciosos a otros tantos municipios en los que no ondeaba la bandera española. En estos expedientes se precisaba la fecha en la que se pedía a las corporaciones locales la colocación de la enseña rojigualda, si se había acatado esta exigencia, el día en que la Abogacía del Estado tramitó el contencioso y si se había dado cumplimiento a ese segundo requerimiento por parte de la Abogacía del Estado. Baluartes de Bildu como el Ayuntamiento de Donostia o la Diputación de Gipuzkoa han cumplido la ley puesto que ni Juan Karlos Izagirre ni Martin Garitano han retirado las enseñas españolas que colocaron sus antecesores también en estricto cumplimiento de la legalidad.

Como se ha señalado, en el caso de Ondarroa el plazo para cumplir con la ley de 39/1981 finalizaba a las 00.00 horas de ayer sábado, pero desde la víspera la corporación presidida por Argia Ituarte cumplió con el requisito, aunque solo fuera durante horas.

Esquivar la medida Los ayuntamientos gobernados por Bildu han buscado subterfugios para cumplir con la ley. Así, el consistorio de Bergara decidió que colocaría la bandera española junto a 55 enseñas de otros tantos países en un intento de esconder la española entre tanto símbolo.

En otro municipio, Tolosa, la colocación de la española estuvo acompañada de una nutrida manifestación que recorrió las calles de la localidad guipuzcoana con cientos de ikurriñas.