vitoria. PNV y EH Bildu acordaron ayer mantener con vida la Ponencia de Paz y Convivencia, aunque tras la desbandada de la formación socialista, el tercer pilar sobre el que se edificó este foro parlamentario hace cinco meses, sea necesario reordenar un plan de trabajo que, de momento, mantendrá en stand by el foro parlamentario a la espera de nuevas adhesiones.
Esta es la principal conclusión del encuentro que ayer sirvió para retomar la actividad interrumpida en junio, después de que el PSE reclamara un aplazamiento hasta constatar que la coalición soberanista hacía suyo el suelo ético fijado como premisa inicial de esta andadura parlamentaria.
El plazo no ha sido suficiente para satisfacer las demandas socialistas, que lejos de inclinarse por avanzar en el trabajo del foro optó esta misma semana por abandonarlo al denunciar una "involución" en el seno de EH Bildu.
Con esta antesala, los representantes del PNV -Joseba Egibar e Iñigo Iturrate- y de la coalición soberanista -Laura Mintegi y Julen Arzuaga- acudían en la mañana de ayer a la Cámara vasca con semblante serio y la intención de sondear qué posibilidades de supervivencia otorgaban a la ponencia. Hora y cuarto después de comenzar el encuentro, ambas formaciones coincidieron en la necesidad de dar continuidad a estos trabajos con el pertinente reajuste que supondrá la reducción de sus miembros y, sobre todo, con el objetivo de mantener el carácter abierto de esta iniciativa para que tanto el PSE como PP y UPyD, formaciones que no han tomado parte en la Ponencia, se integren en el grupo.
Las declaraciones de los últimos días procedentes de la bancada jeltzale sembraron las dudas sobre la continuidad de la ponencia; incluso ayer mismo, en los instantes previos al encuentro que albergó el Legislativo autonómico, el lehendakari, Iñigo Urkullu, destacaba en una entrevista radiofónica que continuar estos trabajos con solo dos miembros -pese a sumar mayoría absoluta en el Parlamento Vasco- "sería tanto como seguir construyendo Euskadi en base a trincheras".
La intención del PNV, según fuentes jeltzales consultadas por este periódico, es mantener vivo este foro e insistir en el llamamiento que ayer verbalizó Egibar para sumar el máximo número posible de fuerzas parlamentarias. Conscientes de las dificultades que entraña esta empresa, el PNV no fija un plazo para responder a esta demanda ni una fecha para un próximo encuentro y aguardará a "que se den las condiciones necesarias" para volver a convocar la ponencia.
Al igual que Egibar, Laura Mintegi criticó el desmarque de los socialistas y destacó que el encuentro de ayer sirvió para trasladar al PNV las propuestas de la coalición soberanista para avanzar en este foro. La portavoz parlamentaria restó importancia a la ausencia de una fecha concreta para retomar los encuentros e instó a fijarse en la "voluntad de navegar" demostrada por su formación y el PNV en lugar de en el "puerto de llegada".
Por su parte, Arantza Quiroga (PP) valoró que el foro sigue "casi en el punto de partida" y afirmó que los hechos les han dado la razón, ya que se constata que todavía EH Bildu tiene que hacer un "gran recorrido".