madrid. El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró ayer no haber "leído" el auto de la jueza Alaya que imputa a los expresidentes andaluces José Antonio Griñán y Manuel Chaves en el caso de los ERE, pero manifestó su "respeto" a la acción de la justicia.

Desde la dirección del PSOE-A vino un mensaje claro de apoyo a Griñán, Chaves y los otros cinco exconsejeros. El vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez defendió la "honestidad y honradez" de los expresidentes de la Junta y criticó las "coincidencias y casualidades" que se producen "una y otra vez" entre importantes autos de la juez Alaya en momentos trascendentales de la vida política andaluza, lo que genera una "alteración del normal funcionamiento de la vida democrática".

Por su parte, el presidente del PP-A, Juan Ignacio Zoido, aseguró que "se han derrumbado los pilares de la Junta de Andalucía" y tachó el caso de los ERE de ser "el caso más grave que ha ocurrido en la democracia española".

"Al final la justicia llega. Tarda, porque tarda, pero llega", recalcó el también alcalde de Sevilla, que también exigió a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, que se diferencie de sus antecesores Chaves y Griñán y dé una "explicación inmediata a los andaluces" sobre "la verdad" de los ERE, dado que su antecesor no lo hizo cuando aún tenía "tiempo suficiente" para ello.

Respecto a la legalidad o falta de ella de la pseudoimputación de Alaya, la Fiscalía Anticorrupción comenzó ayer a estudiar la posibilidad de recurrir el auto de la juez. Así, tiene un plazo de cinco días para probar si se ajusta a derecho y si cumple con la jurisprudencia del Tribunal Supremo en materia de aforamiento. Se trataría de un fallo de procedimiento: Alaya comunicó a los interesados su "condición de imputados", pero no remitió tal información a los tribunales competentes (el Supremo), que podrían seguir los trámites.

mantenerse Por su parte, el coordinador de la presidencia de Izquierda Unida (IU), José Luis Centella indicó por su parte que ahora no están imputados y que, si llegan a estarlo, deberán valorar si mantienen o no sus escaños. "Nosotros siempre defendido que para los imputados en casos de corrupción, hay que abandonar el escaño, pero no estamos en ese caso, sino en que la juez actúe", añadió, recordando la doctrina en Izquierda Unida.