VITORIA. El exmiembro de ETA y preso en la prisión de Zaballa (Araba) Joseba Urrosolo Sistiaga ingresó ayer por la tarde de nuevo en el centro penitenciario tras disfrutar de un permiso de salida de tres días. Desde el viernes el recluso de la denominada vía Nanclares ha pasado su primer permiso ordinario en Pasaia y otros municipios, acompañado de su esposa e hijo, así como de otros familiares y amigos. Este diario pudo contactar con Urrosolo y cruzar unas pocas palabras con el preso desvinculado de ETA. Las suficientes para comprobar su emoción al volver a pisar su tierra más de tres décadas después.
"32 años después he vuelto a caminar por Pasaia, en compañía de mi familia. Han sido unos sentimientos muy muy especiales", comentó ayer Urrosolo de camino a la prisión alavesa una vez finalizado el permiso concedido por la Audiencia Nacional.
Urrosolo fue detenido por la Policía francesa en las proximidades de Burdeos en enero de 1997 y, posteriormente, entregado a España para ser juzgado por varias causas pendientes. Desde entonces ha permanecido recluido en diferentes prisiones hasta que finalmente recaló en Nanclares, y al cierre de la prisión alavesa fue trasladado a la de Zaballa, también en Araba, donde cumple su pena por varios asesinatos y dos secuestros durante su militancia en ETA. Previamente, estuvo varios años en la clandestinidad.
Urrosolo ya había disfrutado de dos permisos de salida extraordinarios, en ambos casos por fallecimiento de un familiar y con custodia policial, pero hasta ahora las autoridades penitenciarias y judiciales se habían resistido a concederle los permisos ordinarios que repetidamente había reclamado. El recluso cumple todos los requisitos para este tipo de salidas temporales ya que, además de su alejamiento de la violencia y de ETA (de la que fue expulsado por su rechazo público a las vías violentas a partir de 1997), ha reconocido el daño causado a las víctimas y ha realizado actividades de tratamiento, foros y talleres con víctimas en la prisión de Zaballa. En este centro también cumplen su pena un número importante de presos que públicamente se han apartado de la violencia de ETA y que integran el colectivo de la vía Nanclares, entre ellos Carmen Gisasola, Valentín Lasarte o Kepa Pikabea.
Los cinco magistrados de la Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional, entre ellos el juez Fernando Grande-Marlaska, consideraron que la "evolución del interno es muy positiva" y apreció "elementos de suma relevancia" para permitir la salida de Urrosolo. También destacaron que concurren en su conducta factores positivos para su rehabilitación y subrayaron la "dificultad de la postura mantenida por el penado en un entorno hostil, lo que positiviza aún más su posición".
No es el primer miembro del Colectivo de presos comprometidos con el irreversible proceso de paz -como se autodenominan los presos de la vía Nanclares- que accede a un permiso de salida. Recientemente la misma sala de la Audiencia Nacional también concedió un permiso a Valentín Lasarte, quien se encuentra a la espera de la concesión definitiva de un segundo permiso penitenciario para salir varios días de prisión. Este beneficio se encuentra paralizado después de que la Fiscalía recurriese la decisión de la Audiencia Nacional que aprobó su salida.
rafael caride En parecida situación se encuentra Rafael Caride Simón, cuyo caso estudia la Audiencia de lo Penal. El exjefe del comando Barcelona que perpetró el atentado de Hipercor en el que fallecieron 21 personas recurrió la decisión del juez de Vigilancia Penitenciaria que le denegó un permiso de fin de semana. Los magistrados han pedido más documentación sobre la contabilización de la acumulación de condenas del recluso antes de decidir si le conceden el recluso.
Las últimas resoluciones de la Audiencia Nacional en relación con los permisos solicitados por estos presos auguran para Caride un final parecido, ya que su trayectoria de rehabilitación es muy parecida a la de Urrosolo, Gisasola, Pikabea y otros integrantes o próximos a la vía Nanclares.
Con estas decisiones, los tribunales han enmendado la plana a la política penitenciaria del Gobierno Rajoy, al menos con este colectivo de presos. A su llegada a Moncloa, el PP aseguró que su intención era mantener abierta la vía Nanclares que se puso en marcha con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Sin embargo, meses después, el Ejecutivo español frenó está vía activando su propio plan de reinserción al que, trece meses después, no se ha adherido ningún preso.