VITORIA. El texto consensuado el sábado por los barones socialistas para una reforma del Estado español en sentido federal no parece haber cerrado ninguno de los debates abiertos. Ni el encaje de Catalunya en España ni el cuestionamiento de la aportación que la CAV y Navarra hacen al resto de comunidades autónomas en concepto de solidaridad. Respecto a este último aspecto, el diputado socialista Ramón Jáuregui reconocía ayer que el índice de imputación del Cupo, el 6,24% que la CAV paga al Estado por todos sus gastos en competencias no transferidas, es una cantidad "probablemente superior al peso en renta o población" de Euskadi respecto al conjunto de España. Dicho esto dejó caer que, pese a todo, la CAV sigue sacando ventaja de su sistema propio de fiscalidad.
"Se dice que esa cantidad da un resultado en financiación per cápita muy superior al de otras comunidades", resaltó Jáuregui, también coordinador de la Conferencia Política que el PSOE atrasa hasta el 8, 9 y 10 de noviembre por razones de agenda. En una entrevista en Radio Euskadi, el dirigente socialista trató de zanjar las dudas que existen en la CAV sobre el posicionamiento último del PSOE respecto al Concierto Económico vasco. Volvió a distinguir, como los hicieron los barones socialistas en el cónclave territorial del pasado sábado, entre Concierto y el Cupo, esto es la materialización en la cantidad que hay que pagar al Estado.
Del primero dijo que la propuesta socialista de reforma constitucional lo "preserva", lo "blinda inclusive", y no contempla "en absoluto que sea un privilegio". "Otra cosa -matizó a renglón seguido- será el cálculo de los mecanismos de contribución que tienen en el Convenio navarro y el Concierto las comunidades vasca o navarra a las cargas del Estado".
En este sentido, insistió en la idea de que vascos y navarros deben participar "en los fondos de solidaridad interterritorial", como si no lo hieran ya. La CAV financia el 6,24% de todos los Fondos de Compensación Interterritorial que consignan los Presupuestos Generales del Estado, lo mismo que Navarra, cuya aportación es del 1,6%.
Sin embargo, el PSOE plantea en su propuesta aprobada el sábado la creación de un nuevo fondo de reserva del Estado del Bienestar, una especie de hucha como la de las pensiones, para garantizar que todas las comunidades con independencia de su desarrollo tengan cotas de bienestar similares en educación, sanidad, servicios sociales y pensiones.
"Salir del paso" Las propuestas socialistas sobre el modelo de Estado plasmadas el pasado fin de semana no han encontrado gran acogida en el resto de formaciones políticas. Desde el PNV, Andoni Ortuzar señalaba ayer que es un acuerdo para "salir del paso", que tendrá "poca vigencia" y que no servirá para arreglar las posturas "irreconciliables" entre las federaciones socialistas. De manera paralela, las Juntas Generales de Álava rechazaban por unanimidad "cualquier intento o pretensión de revisión del Cupo" que pueda causar "perjuicio" a Euskadi.
Más allá de la CAV, la última reafirmación ideológica de los de Alfredo Pérez Rubalcaba contó con las críticas de CIU y ERC -y eso que la propuesta busca el encaje de Catalunya en España-, así como el rechazo del PP. Su secretaria general, María Dolores de Cospedal, tachó de "inaceptable" que el PSOE "para resolver un problema interno haya cedido a las presiones del PSC" y promueva una "nueva" Constitución.
"No se resolverán las posturas irreconciliables del PSC con el PSOE de Andalucía o con el PSE"
Andoni Ortuzar
Presidente del EBB del PNV
"Es inaceptable que el PSOE, para resolver un problema interno, quiera una nueva Constitución"
María dolores de Cospedal
Secretaria general del PP
