Bilbao. Con la negociación presupuestaria en su recta final, y a una semana de la votación de las enmiendas a la totalidad, el Gobierno y el PNV exprimen las vías disponibles para sortear la prórroga de las Cuentas. Tras una primera ronda de contactos del consejero de Hacienda Ricardo Gatzagaetxebarria, y de una segunda tanda liderada por el lehendakari, Iñigo Urkullu, fuentes conocedoras del proceso adelantaron a este diario que Sabin Etxea se sumará a las próximas conversaciones. El partido asumirá la negociación durante la próxima semana con la mirada clavada en el viernes, cuando se votará la devolución de las Cuentas; y se centrará en el PSE. Al margen de esa vía, y por parte del Gobierno, el consejero seguirá citándose con todos los partidos de la oposición durante las próximas jornadas, y no se descarta una intervención de última hora del lehendakari. A pesar de ello, las fuentes consultadas consideran que Urkullu "ya ha hecho lo que tenía que hacer", y que es el momento de que la negociación entre en una nueva fase.

El PNV se centrará en tratar de desactivar la enmienda a la totalidad del PSE, ya que su abstención, sumada a la del PP, bastaría para aprobar el proyecto. Jeltzales y socialistas mantienen abierto un canal de interlocución en materia fiscal desde que Iñigo Urkullu ganara las elecciones y apostara por debatir una reforma del sistema impositivo con el resto de partidos. Teniendo en cuenta que la reforma de la fiscalidad ha sido una de las reivindicaciones por excelencia del socialismo, un gesto del PNV en ese ámbito podría contribuir a desactivar la enmienda a la totalidad. De hecho, el documento presentado por el lehendakari a los grupos en el marco de la negociación presupuestaria también aludía a la fiscalidad y, como aspecto novedoso, a la necesidad de fortalecer la coordinación en la lucha contra el fraude, y agilizar el intercambio de datos fiscales entre las haciendas. El partido seguirá explorando la vía del diálogo, si bien la pelota quedará, en cualquier caso, en el tejado de Patxi López, que será quien fijará la postura final del PSE.

Por otra parte, fuentes de Lehendakaritza explicaron a este periódico que Urkullu ya habría ejercido el papel que le correspondía y que, en cualquier caso, tampoco podría participar desde el comienzo en la nueva ronda por su viaje institucional a Bruselas. Sin embargo, el lehendakari volverá a la CAV en la medianoche del miércoles, de modo que tendría margen para participar en un último encuentro el mismo jueves, un día antes de la votación de las enmiendas. El detalle no resultaría anecdótico, ya que desde Lakua dan por sentado que, si se firma un acuerdo, se hará en el último minuto; y no descartan que Urkullu decida implicarse nuevamente en el estertor final de la negociación para tratar de salvar el presupuesto. El lehendakari pudo deslizar ayer mismo esa posibilidad al asegurar durante un acto de la Agrupación de Sociedades Laborales de Euskadi que intentará alcanzar un acuerdo "hasta el último momento, y después del último momento, también".

Además, apeló a la "responsabilidad" de la oposición. "Solo pido que afrontemos la situación con realismo. Es ahora cuando hay que arremangarse y arrimar el hombro con responsabilidad y altura de miras. Toca dejar atrás la confrontación y el regate en corto. Hay que aplicar en toda Euskadi el espíritu de Bermeo", dijo, en alusión a la solidaridad con los afectados por el incendio en la localidad vizcaína.

el consejero El lehendakari, quien ya lideró la segunda ronda de conversaciones sobre los Presupuestos, devolverá la batuta de las negociaciones al consejero de Hacienda, Ricardo Gatzagaetxebarria. El jeltzale arrancará una nueva tanda de contactos la próxima semana, que comenzará con sus encuentros con UPyD -el lunes- y PP -el martes-. Aún no se ha cerrado la fecha de las entrevistas con el resto de partidos.

El consejero también está dispuesto a seguir intercambiando datos por vía telefónica, al margen de los encuentros cara a cara. Esas reuniones servirán para que la oposición le traslade su respuesta al documento de Iñigo Urkullu, sobre el que se continuará trabajando. Según fuentes de Lakua, aún no se habría recibido respuesta alguna. El PSE, por su parte, ha renunciado por el momento a presentar enmiendas parciales, y asegura que su veto es firme.

Andoni Ortuzar y José Antonio Pastor, en una imagen de archivo. Foto: efe

Gatzagaetxebarria seguirá reuniéndose con los partidos, y no se descarta un gesto de última hora de Urkullu

El lehendakari aseguró ayer que continuará buscando el acuerdo presupuestario "hasta el último momento"