palma de mallorca. La expectación ante la declaración de Diego Torres ayer en Palma de Mallorca ante el juez José Castro, instructor del caso Nóos, y el fiscal Pedro Horrach, era máxima y el exsocio de Iñaki Urdangarin no defraudó. Su comparecencia estuvo plagada de importantes revelaciones, entre ellas que la infanta Cristina y la Casa Real estaban al tanto de todas las actividades del Instituto Nóos porque Urdangarin les informaba, aunque defendió que todas las actuaciones realizadas en esta entidad eran legales.
Según fuentes jurídicas, Torres explicó al juez que la infanta conocía todo lo que se hacía en el Instituto Nóos, como todos los miembros de la junta directiva de dicha entidad, de la que también formaba parte el secretario de las infantas, Carlos García Revenga. Torres declaró que cada miembro de la junta directiva participaba en este instituto en función de sus conocimientos. Manifestó en este sentido que cuando había alguna propuesta o asunto a impulsar, Urdangarin decía que "lo consultaría" con su mujer.
Por su parte, la letrada del sindicato Manos Limpias, Virginia López Negrete, señaló a los medios que, tal y como había apuntado Torres, la infanta "era conocedora de todo lo que ocurría". Sin embargo, la Fiscalía no se plantea de momento pedir la citación de la infanta ni como testigo ni como imputada.
En cuanto al monarca, López destacó que Torres había aportado correos electrónicos que pondrían de manifiesto que el rey "era conocedor de parte de los patrocinios y de los negocios" que Urdangarin llevaba a cabo a través del Instituto Nóos.
Ante las afirmaciones de Torres, el abogado de Urdangarin, Mario Pascual Vives, se mostró "convencido" de que la mujer del duque "no será imputada". Cabe recordar que la Audiencia Provincial de Baleares ya rechazó la petición de Manos Limpias de que la infanta Cristina fuese citada a declarar en calidad de imputada. Y es que este sindicato, a través del escrito que presentó para pedir el encausamiento de la infanta, considera que la hija del rey don Juan Carlos fue "beneficiaria directa" del incremento patrimonial y de los ingresos obtenidos de forma supuestamente fraudulenta por el duque.
En el caso Nóos se investiga el presunto desvío de unos 6,1 millones de euros de las administraciones balear y valenciana al Instituto Nóos entre los años 2004 y 2007.
El exsocio de Urdangarin negó haber incurrido en un delito fiscal al ser interrogado acerca del presunto impago del impuesto de sociedades al que Nóos debía hacer frente en 2007. El imputado señaló que todas las facturas que tanto él como Urdangarin dedujeron ese año a Hacienda respondían a servicios reales, si bien no supo concretar a qué tipo de trabajos hacían referencia.
Durante siete horas de declaración, a preguntas del juez y del fiscal, Torres se refirió también en varias ocasiones al abogado José Manuel Romero, asesor jurídico de la Casa Real y conde de Fontao, quien recomendó a Urdangarin en 2006 que evitara tener un papel protagonista en la actividad pública del Instituto Nóos. Según Torres, el conde de Fontao diseñó una estrategia para que Urdangarin no figurase públicamente en las actividades del Instituto Nóos ni en la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (Fdcis), que sucedió a dicha entidad. Tras las últimas revelaciones de Torres, los investigadores del caso Nóos prevén que Romero sea llamado a declarar.
La defensa del exsocio del duque de Palma entregó al juez correos electrónicos y documentos sobre la gestión del Instituto Nóos con la intención de poner de manifiesto que tanto la infanta como García Revenga intervenían de forma activa en la toma de decisiones.
reunión en zarzuela Torres señaló también que en 2004 se celebró una reunión en el Palacio de la Zarzuela, a la que asistió con Urdangarin y donde participaron el entonces presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, en la que se acordó la organización del Valencia Summit. Las tres ediciones de este foro deportivo, entre 2004 y 2006, se encuentran entre las actividades de Nóos investigadas en esta causa por el presunto desvío de fondos públicos. A preguntas del juez, el exsocio del duque de Palma negó que en esta reunión estuviera presente el rey.
Tras la declaración de Diego Torres compareció su esposa, Ana María Tejeiro, que fue responsable del área jurídica y fiscal del Instituto Nóos, quien dijo que desconocía la actividad que se realizaba en dicha entidad.