MADRID. En un escrito al que ha tenido acceso Europa Press, el fiscal Daniel Campos destaca la "irrelevancia penal" de los hechos denunciados al entender que el acto dispensado al preso, condenado por el secuestro del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara fue "breve", se produjo "en las inmediaciones de su domicilio" de Mondragón y no buscaba "difusión pública" porque, de hecho, los convocantes prohibieron el acceso a los medios de comunicación.

"Sin perjuicio del comprensible rechazo que a las víctimas pueda provocar el mero hecho de que el condenado disfrute de su libertad, no parece razonable criminalizar cualquier acto del que el penado pueda ser sujeto o objeto, de recibimiento o bienvenida realizado por vecinos o amigos, siempre y cuando se realicen en privado", señala el informe.

El representante del Ministerio Público sostiene que las bienvenidas o celebraciones que Uribetxeberria pudo recibir "en su entorno familiar o social" tras abandonar el Hospital Donostia, en el que estuvo ingresado un mes y medio para ser atendido de un cáncer, no pueden ser objeto de "reproche penal".

"Un acto celebrado a puerta cerrada no puede equipararse a la promoción pública de la que habla la jurisprudencia para que los hechos sean constitutivos de un delito de enaltecimiento del terrorismo", argumenta.

"SIN CONVOCATORIA PREVIA" La posición del fiscal se basa en un informe emitido por la División Antiterrorista de la Ertzaintza el pasado 3 de diciembre en el que se apuntaba que el acto de Mondragón se desarrolló sin "comunicación alguna" o "convocatorias previas en los medios habituales".

El acto tuvo lugar a las 21.30 horas del 23 de octubre pasado en la 'herriko taberna' Irati del municipio guipuzcoano, donde un grupo de amigos del preso le recibió con ikurriñas y pancartas a favor del acercamiento de reclusos a Euskal Herria. Los concentrados, según la policía autónoma vasca, formaron un "cordón de seguridad" para impedir "el acceso de los medios de comunicación al local".

Según la AVT, que recordaba la prohibición impuesta a Uribetxeberria de participar en actos de enaltecimiento y legitimación de la violencia, en el interior del local se escuchó un 'aurresku' y se profirieron gritos como 'Jo ta ke, iribazi arte'.

Uribetxebarria quedó en libertad el pasado 12 de septiembre después de que la Sala Primera de la Sala de lo Penal confirmara un auto del juez central de Vigilancia Penitenciaria, José Luis de Castro, en el que se acordaba la excarcelación del recluso por "razones humanitarias".