Navarro no cierra la puerta a apoyar a Mas, aunque lo ve "difícil"

El líder del PSC afirma que no se siente cuestionado y descarta convocar un congreso extraordinario

vitoria. El líder del PSC, Pere Navarro, pese a no cerrar la puerta a apoyar la investidura del presidente catalán en funciones, Artur Mas, consideró muy difícil esta posibilidad ya que, según su parecer, CiU no tiene "credibilidad" tras incumplir por completo el acuerdo de investidura que alcanzó en 2010 con su partido. "Nuestra experiencia en la anterior legislatura es muy negativa. Salimos de una posición poco propicia para negociar", sentenció Navarro, que también señaló que hay muy pocas posibilidades de que los socialistas entren en el futuro gobierno.

El líder del PSC fijó las cuatro prioridades de su partido a corto plazo: convocar una cumbre anticrisis con todas las fuerzas políticas, instar al Congreso a reformar la Constitución para avanzar hacia un Estado federal, impulsar medidas de profundización democrática y priorizar los derechos sociales de los ciudadanos. Pese a insistir en que el gran fracaso de estas elecciones es el de Mas y el de su partido, CiU, descartó pedir su dimisión o impulsar una moción de censura a corto plazo, y ha advertido a los que piensen hacerlo de que es un "brindis al sol".

Navarro, que reiteró que éstas eran unas elecciones innecesarias, ha acusado a Mas de haberlas convocado para aprovechar las debilidad del PSC y convertirlo en un "partido residual", un objetivo que, a su juicio, no ha logrado. "Han sido unos malos resultados, los peores del PSC, pero tenemos una buena base para continuar trabajando en el Parlament y con la sociedad catalana", sentenció el líder socialista, que ha hablado de reflexión y reconstrucción del partido, pero sin concretar ningún cambio interno.

Según Navarro, ayer empezó a caminar con más fuerza el "nuevo PSC" que se dibujó en el congreso de diciembre de 2010, lo que hace innecesario un cónclave extraordinario, y lo que debe hacer centrar el partido en cumplir con las resoluciones congresuales de hace un año.

respaldo interno Pere Navarro aseguró que no se siente cuestionado por su partido pese a haber cosechado los peores resultados socialistas en unas elecciones catalanas, y descartó convocar un congreso extraordinario aunque, según admitió, alguna voz en la Ejecutiva se lo ha pedido. "Me siento muy apoyado", sentenció en rueda de prensa argumentando que un congreso interno es una cuestión muy endogámica y que lo que necesita el PSC ahora no es tanto dialogar consigo mismo como tender puentes con la sociedad para recuperar los apoyos perdidos.

Navarro y el alcalde de Cornellà de Llobregat, Antoni Balmón. Foto: Efe