El escándalo de los ERE andaluces también salpica al suegro de Arenas

sevilla. El suegro de Javier Arenas, Manuel Olivencia, cobró 120.000 euros del dinero de los parados andaluces. Así al menos lo afirmaba ayer la web de Público que, centrándose en el auto dictado el pasado 14 de marzo por la jueza Mercedes Alaya, la instructora del caso de los ERE, afirma que éste "incluye dos facturas de casi 120.000 euros cobradas por el bufete de Manuel Olivencia, suegro de Javier Arenas", como parte de las "cantidades de dinero que de manera presuntamente ilícita han salido del erario público por orden del ex director general de Trabajo de la Junta de Andalucía, Francisco Javier Guerrero".

Según explicaba Público, cuando en abril de 2011 aparecieron las primeras noticias de esos cobros, Luis Olivencia, cuñado de Arenas y director actual del bufete, declaró: "Se nos llamó para prestar un servicio y no nos preocupamos de la situación interna de Empleo, solo de que nos volvieran a contratar". En el auto judicial, la jueza Alaya alude textualmente a "facturas de asesoramiento a empresas (sin que conste causa legal para ello)", que se corresponden con doce pagos realizados por Guerrero en 2002. De esa docena de pagos, dos (los más cuantiosos) fueron girados al Bufete Olivencia Ballester.

Esta información trascendió el mismo día que Juan Francisco Trujillo, chófer del ex director general de Trabajo, fue encarcelado tras revelar que él y su jefe gastaban al mes 25.000 euros de dinero público en cocaína.