madrid. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE) podrá imponer una multa de hasta el 0,1% del PIB a los países de la eurozona que no incorporen correctamente la denominada regla de oro, la legislación de equilibrio presupuestario, a sus respectivos ordenamientos. Esta es la principal novedad del cuarto borrador del Tratado para reforzar la disciplina fiscal, que los líderes europeos quieren aprobar en la cumbre del 30 de enero y en el que no participa Reino Unido.

La regla de oro, que países como España y Alemania ya han incorporado a sus respectivas Constituciones, obliga a tener un presupuesto equilibrado o con un déficit máximo del 0,5% del PIB. El borrados que los jefes de Estado de la UE tienen encima de su mesa especifica que si se supera este umbral, deberá desencadenarse automáticamente un mecanismo de corrección. Estas exigencias deberían incorporarse en el plazo de un año a las legislaciones nacionales de los Estados miembros en "disposiciones vinculantes y de carácter permanente, preferiblemente constitucionales".

El nuevo borrador refuerza los poderes de la Comisión Europea, a la que se encarga la tarea de verificar si los Estados firmantes han traspuesto correctamente a sus legislaciones la regla de oro. No obstante, el Ejecutivo comunitario no podrá denunciar las irregularidades al Tribunal de Justicia, sino que tendrá que hacerlo uno de los Gobiernos comunitarios.

La sentencia del Tribunal "será vinculante para las partes". Si el país incumplidor no adopta las medidas correctivas necesarias, el TUE impondrá una multa "apropiada para las circunstancias y que no excederá el 0,1% del PIB".

ayudas del fondo de rescate El Tratado que se está preparando (y que podría ser aprobado en la cumbre del próximo día 30) entrará en vigor cuando lo hayan ratificado 13 países de la eurozona (la fecha indicativa es enero de 2013). En un intento de acelerar las ratificaciones, el último borrador deja claro que los Estados que no lo hayan ratificado no podrán acceder a las ayudas del fondo de rescate permanente. "A partir del 1 de marzo de 2013 la concesión de asistencia en el marco de nuevos programas del mecanismo europeo de estabilidad estará condicionada a la ratificación de este Tratado", señala el borrador en uno de los puntos que suscita más polémica.