vitoria. "Con un sólo diputado ya es suficiente para hacer mucho ruido, mira Llamazares, mira Rosa Díez". Con esta frase respondía el número uno por Álava de Equo al Congreso de los Diputados, Mikel Sáez de Vicuña, cuando se le preguntaba por la capacidad del nuevo partido para romper la inercia del bipartidismo durante el coloquio de arranque de campaña celebrado el pasado día 4 en el centro cívico Aldabe de Vitoria.
A Equo, como a prácticamente todos los partidos ajenos al binomio PP-PSOE, la nueva Ley de Partidos les ha puesto el listón muy alto. Sáez de Vicuña, junto a la número dos por Álava de la lista ecologista, Antxeta Knörr, explican cómo se las arreglan para hacerse ver en medio de las restricciones legales, y cómo han ido sorteando los obstáculos que la ley impone para hacer elegible en las urnas a una opción política. Lo primero fue reunir las firmas necesarias para poder presentarse. "En Álava el primer fin de semana ya teníamos el objetivo cumplido, necesitábamos 251 firmas. Fue relativamente fácil porque hemos encontrado respuesta en la gente, ahora las hemos cuadruplicado, tenemos más de mil", señala Antxeta. Mikel explica que, además, la búsqueda de las firmas por Álava les ha dado la oportunidad de darse a conocer, de hacer campaña.
Otro de los pasos imprescindibles era dotarse de los medios necesarios para promocionarse. "No hay dinero, no hemos pedido créditos a los bancos para financiar la campaña, así que lo imprimimos todo en casa, y hacemos las cosas a mano", señala Mikel. Antxeta considera que ese amateurismo "es el precio que tenemos que pagar", pero también que le sirve a Equo para implicarse más. "No nos queda otra, hacemos nosotros mismos las traducciones, nos encargamos de la logística, vamos todos como burros", afirma.
"meter la patita" Lo siguiente es colocar toda esa propaganda electoral, dentro de las restricciones que les impone la ley. "Está siendo difícil, en los huecos que tienes en los paneles nos corresponde un trozo así -enmarca con la mano el tamaño de un cuaderno-, un 0,5% del stand, con un folio te pasas de la medida, no puedes poner ni un folio para publicitarte", denuncia Antxeta.
Los candidatos de Equo explican que la nueva formación tiene un objetivo muy claro en las próximas elecciones, acceder al Congreso aunque sea con un único diputado. "Nosotros somos conscientes de que es muy difícil meter la patita ahí, pero es necesario porque con el dinero que consigue una persona en el Congreso da para abrir una sede en Madrid, para hacer publicidad", señala Antxeta. "Son 170.000 euros, se te cae la cara de vergüenza, no hace falta ni tanto dinero", apostilla Mikel.
Ciertamente, no es sencillo obtener representación política si no se pertenece a los grandes partidos. "Izquierda Unida tiene un millón de votantes a nivel estatal, y en el Parlamento tiene un diputado. Otros tienen diez millones de votos, deberían tener diez, no más de cien, a mí las cuentas no me salen", denuncia Antxeta. Los dos cabezas de lista alaveses resultaron elegidos para aspirar desde Álava a ocupar un escaño en el Congreso "de la manera más trivial, hubo primarias, no hubo dedazo", señala Mikel. "Yo no estaba vinculado directamente con Equo -explica-, pero la idea me gustaba, quería entrar a echar una mano, presenté mi candidatura para obligarme a colaborar y por sorpresa salí elegido".
listas en cremallera El caso de Antxeta "fue bastante curioso, porque estábamos mucha gente implicada, pero no se presentaron muchas candidaturas. En la apuesta por la paridad, tenemos listas en cremallera, así que yo soy segunda también sin querer, porque las chicas no se decidían a presentarse, hay que decirlo", critica. La número dos por Álava recuerda que fue elegida "en una asamblea a mano alzada".
Por otro lado, uno de los postulados de la nueva formación es que las decisiones se toman siempre así, de manera horizontal, y de hecho el programa electoral se redactó siguiendo en buena medida las propuestas realizadas por los internautas miembros de la Equomunidad, el foro de participación del partido. La formación defiende una visión global de los problemas que afectan a la ciudadanía, derivada de su carácter ecologista, y por ello no han establecido una opinión concreta con respecto a cuestiones limitadas al ámbito vasco. Equo defiende el derecho a decidir en Euskadi, pero no se posiciona ni a favor ni en contra de la independencia, y en lo relativo al euskera asegura que su promoción como parte del patrimonio cultural es imprescindible.
En cuanto al anuncio de ETA sobre su renuncia a seguir con la violencia, un miembro del nuevo partido explica, tras la marcha ciclista que el pasado sábado dió a conocer sus propuestas en Vitoria: "Somos un partido pacifista y nos alegramos de la actual situación, pero no vamos más allá porque Equo ha mamado de diversas culturas políticas y es muy diverso, miramos más los problemas a nivel global".