Texas. El gobernador de Texas, Rick Perry, anunció ayer su candidatura por el Partido Republicano para las elecciones presidenciales de 2012, poniendo fin así a varios meses de especulaciones. Durante el anuncio, el político, del sector conservador republicano, criticó la "falta de liderazgo" del presidente Barack Obama ante las turbulencias económicas que vive el país tras la rebaja de la calificación de la deuda de Estados Unidos por parte de Standard & Poors.
Perry ironizó que a pesar de que el presidente Obama habla de recuperación con una desempleo del 9,1 por ciento "eso no es una recuperación, es un desastre económico". También arremetió contra la reforma sanitaria impulsada por Obama para incluir a más de 30 millones de personas que no tenían seguro médico, que consideró una "intromisión". "(Como Presidente) voy a trabajar todos los días para que Washington sea tan intrascendente en su vida como pueda", dijo abogando por un límite en los impuestos. El gobernador intervino horas antes de que se cerraran las urnas de una consulta informal conocida como straw poll en Iowa, el primer estado en el que se vota en las elecciones primarias.
Los republicanos eligen al que sería su presidente entre quienes ya habían formalizado su candidatura, como el legislador de Texas Ron Paul; el exgobernador de Massachusetts Mitt Romney; la legisladora Michele Bachmann; el exgobernador de Minesota Tim Pawlenty; el exgobernador de Utah Jon Huntsman; el exsenador de Pensilvania Rick Santorum; el empresario Herman Cain, el expresidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich, y el legislador de Michigan Thaddeus McCotter. Algunos acusan a Perry de oportunista al anunciar su candidatura el mismo día que la "straw poll" de Iowa en la que compiten el resto de candidatos republicanos.