DESDE el pasado 22 de mayo, el mismo momento en que los resultados de las elecciones municipales y forales colocaron a Bildu como la fuerza más votada en Gipuzkoa, desde las filas populares y socialistas se lanzó la idea de que la coalición abertzale no podía acceder a la presidencia de la Diputación Foral en ese territorio ya que, según aseguraron sus portavoces, "se paralizaría Gipuzkoa". Ahora, después de que Martín Garitano se haya convertido en el máximo responsable del ente foral, las grandes infraestructuras que planean en el horizonte guipuzcoano pueden convertirse en el gran caballo de batalla para la coalición. "No tengan miedo, Bildu no va a paralizar Gipuzkoa", aseguró en el pleno de investidura el nuevo diputado general. Fue su promesa y, ahora, los partidos esperan que refrende con hechos estas palabras.

En los próximos meses, las tres grandes infraestructuras previstas en territorio guipuzcoano -el Puerto de Pasaia, la llegada del TAV y la Incineradora de Zubieta- serán los vértices clave de la actuación de Bildu. A ellos, además, hay que sumar el proyecto de fusión de las cajas vascas o el de la ampliación del aeropuerto de Hondarribia.

Tanto antes de los comicios como con posterioridad al 22-M, se ha echado de menos una mayor concreción por parte de Bildu hacia estos proyectos calificados como claves en el futuro del territorio. Sin embargo, grosso modo, sí es cierto que lo dicho antes y después de las elecciones permite visualizar que la coalición se ha opuesto al Puerto de Pasaia y habla de una moratoria en cuanto a la incineradora, mientras que en lo referente a la Y vasca hay más nebulosa. Bildu, incluso pese a poder contar con el apoyo puntual de Aralar, no dispone de la mayoría en las Juntas Generales y sabe que la oposición puede sacar adelante proyectos que la coalición se niegue a llevar a cabo. A partir de ahora sabrá de primera mano que muchas veces no es lo mismo predicar que dar trigo.

El presidente de la patronal vasca Confebask, Miguel Lazpiur, aseguró el pasado junio que la organización que él preside no ha recibido muestras de preocupación del empresariado ante la posibilidad de que Bildu se hiciera con el Gobierno de la Diputación Foral de Gipuzkoa o del Ayuntamiento de Donostia, como al final ha sucedido. No obstante, y sin querer entrar en cuestiones de índole político, el presidente de la patronal vasca se refirió a la oposición inicial de Bildu al TAV o al puerto exterior de Pasaia, y pidió a los dirigentes de la coalición "que sean conscientes de la realidad y que se continúe con los proyectos ya fijados".

Puerto de Pasaia

Oposición frontal

Tanto el Gobierno español como el Ejecutivo vasco, la Diputación Foral de Gipuzkoa y la Autoridad Portuaria de Pasaia firmaron en Madrid un protocolo por el que las cuatro instituciones se comprometían a la construcción y desarrollo del puerto exterior pasaitarra. Sin embargo, Bildu, que logró la mayoría en dicha localidad, aboga por regenerar la bahía sin construir este puerto. En plena campaña electoral, Martín Garitano y la actual presidenta de la Juntas Generales, Lohitzune Txarola, señalaron que la apuesta de la coalición para este municipio es impulsar la actividad portuaria en la bahía, modernizando para ello las actuales instalaciones e incorporar para la zona nuevas actividades respetuosas con el medio ambiente.

Los representantes de Bildu hicieron hincapié en la necesidad de conservar el entorno natural de Pasaia y, para ello, abogaron por declarar reserva natural marina a la zona de Ulia-Jaizkibel dentro de la Red Natura 2000. También en referencia a Pasaia, Lohitzune Txarola reclamó el abandono de las energías que destruyen el medio ambiente y solicitó el cierre de la central térmica de carbón de la localidad.

Tras las elecciones, Martín Garitano ha insistido en la negativa de su formación a la construcción del Puerto de Pasaia. El actual diputado general recordó que "además de Bildu, lo han dicho los ciudadanos de todos los municipios que afectan a esa bahía e incluso el Ministerio de Medio Ambiente del Gobierno español, que ha señalado que no es sostenible tanto desde el punto de visto medioambiental como económico".

El nuevo presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia, Lucio Hernando, calificó hace unas semanas el proyecto de ampliación del puerto como importantísimo para Gipuzkoa. Según un informe redactado en septiembre del pasado año, el efecto económico medio anual de esta infraestructura ascendería a un total de 542 millones de euros, generando en un plazo de cuarenta años más de dos millones de empleos en el territorio. Hernando confirmó que están trabajando en la elaboración del Informe de Sostenibilidad Ambiental, que deberá estar finalizado antes del próximo 31 de octubre y que será sometido al dictamen del Ministerio de Medio Ambiente, que ha puesto un listón muy alto para dar su aprobación al proyecto.

Un buen ejemplo del trabajo que se está haciendo para corregir el impacto medioambiental es que de los 765 millones de euros en los que actualmente está cifrado el proyecto, 120 millones de euros se destinarían a aplicar las medidas correctoras para minimizar el impacto ambiental.

Bildu ha encontrado un aliado a sus tesis en el informe elaborado por un centenar de personas de distintos ámbitos de la sociedad guipuzcoana -arquitectos, ingenieros, economistas, abogados y profesores de la UPV-EHU- en el que plantean serias dudas sobre la sostenibilidad ambiental, social y económica del proyecto de la dársena exterior del Puerto de Pasaia, ya que consideran que "destruirá una parte importante del patrimonio natural y, además, se deberá costear durante décadas". Los firmantes del estudio, entre los que se encuentran Francisco Miner, director del Puerto de Pasaia entre 1978 y 1994 ; Juan Gutiérrez, ex responsable de operaciones portuarias de Pasaia; o la magistrada Garbiñe Biurrun, abogan por la regeneración de Pasaia en el interior del puerto, sin la ampliación de éste con una dársena exterior.

Obras del TAV

Sin competencias

Otro de los puntos calientes es el concerniente a las obras del Tren de Alta Velocidad. Resulta evidente que dentro de Bildu hay distintas sensibilidades sobre este tema. La izquierda abertzale tradicional se ha opuesto siempre de forma radical a la Y vasca, mientras que Eusko Alkartasuna, que ha llegado a tener responsabilidades en el Gobierno vasco, ha sido un firme defensor de la misma.

¿Qué va a suceder a partir de ahora? Garitano, antes de ser elegido diputado general de Gipuzkoa, dejó claro en una entrevista su posición contraria al TAV, pero, de la misma manera, en una respuesta pragmática, no fue más allá al señalar que no es competencia de la diputación ni de los ayuntamientos. "Es conocida nuestra postura sobre el Tren de Alta Velocidad, pero no podemos actuar porque ni Diputación ni Ayuntamiento, que es lo que se dirimía en las elecciones, tienen competencia al respecto", manifestó. Lo cierto es que el mismo día que se constituían las nuevas corporaciones municipales, el 11 de junio, Arrasate fue escenario de una manifestación anti-TAV a la que Martín Garitano no acudió al asegurar que no estaba previsto en su agenda.

¿Qué opina de ello EA? Como se ha señalado, la formación liderada por Pello Urizar ha defendido la llegada de la citada infraestructura a Gipuzkoa, y lo ha hecho dentro de las instituciones en las que ha tenido responsabilidad de gobierno, tanto de forma directa como tras la firma de un acuerdo de colaboración.

Sin embargo, el fundador de Eusko Alkartasuna y lehendakari, Carlos Garaikoetxea, negó que, tras la victoria de Bildu en Gipuzkoa, se vaya a paralizar la Y ferroviaria en ese territorio. "Que alguien vea el programa de Bildu y verá que eso no aparece en ningún sitio. Es más, muy significativamente el candidato a diputado general -refiriéndose al ya elegido Martín Garitano- ha dicho que eso ni es competencia de Bildu. Es la manera más frontal de desmentirlo. Sólo hemos propuesto correcciones: no queremos una Y, sino una H, para vertebrar el País Vasco con Navarra", explicó el veterano político. Una diferente sensibilidad, la mostrada por la izquierda abertzale tradicional y EA, que Bildu deberá aclarar en el futuro cercano.

Incineradora de Zubieta

Moratoria de cinco años

Por lo que respecta a la Incineradora de Zubieta, recién adjudicada por 223 millones a la UTE formada por FCC, Zerbitzu Elkartea, Altuna y Uria y AE&E Inova, la coalición abertzale impulsa una moratoria de cinco años, periodo durante el cual será cada municipio quien decida su modelo de gestión de residuos. "A pesar de ser un proyecto iniciado, creemos que no debe concluirse así. Lo que es grave es hacer algo a espaldas de la ciudadanía", manifestó Martín Garitano el día que se acreditó como juntero.

Y es que Bildu apostó en campaña por potenciar proyectos "sostenibles, equilibrados con el medio ambiente y que protejan la salud de la ciudadanía". Para ello, en opinión de los responsables de la coalición, se debe abrir el "debate" a "toda la sociedad", lo que, a su juicio, "abre la puerta a mecanismos de participación y decisión como referendos o consultas populares". Y es en el marco de estas consultas donde enmarcan el futuro de la Incineradora de Zubieta.

Hay que recordar que en Hernani, Usurbil y Oiartzun, municipios en los que gobernaba Acción Nacionalista Vasca antes de las elecciones municipales y forales de mayo, y que ahora están en manos de Bildu, estaba establecido un sistema de recogida de basuras puerta a puerta.

Fusión de las cajas

Negativa a la "bancarización"

Aunque no se trata de una obra de insfraestructura, otro de los asuntos que tiene por delante el nuevo diputado general de Gipuzkoa es la fusión de las cajas vascas. Martín Garitano ha afirmado por activa y por pasiva que a la coalición aber-tzale no le da "miedo" esta fusión de BBK, Kutxa y Caja Vital, pero considera que para crear un sistema financiero público vasco fuerte que no tienda a la "bancarización", habría que "rediseñar el proyecto" de integración de las entidades de la CAV.

La coalición carece de momento de representación en los consejos de administración, aunque uno de sus socios, Eusko Alkartasuna, sí tiene presencia en los organismos de las cajas. Bildu, según indicó tras el nacimiento de Kutxa Bank, apuesta por una caja vasca "fusionada", al tiempo que criticó que la propuesta presentada "deja abierta la posibilidad de una futura privatización".

Además de estos proyectos, existen otros en los que los dirigentes de Bildu han dejado claro de antemano cuál es su posición. Así, los responsables de la coalición aber-tzale han mostrado su desacuerdo con la posible ampliación del aeropuerto de Hondarribia y, por contra, consideran más viable la potenciación del de Biarritz.

Martín Garitano fue proclamado diputado general de Gipuzkoa el pasado 23 de junio. Foto: r. plaza

Imagen de las obras de la 'Y' vasca en Ordizia. Foto: zigor alkorta

La coalición aboga por regenerar Pasaia, pero muestra su total oposición a la creación del puerto exterior

Martín Garitano es contrario al TAV, pero recuerda que se escapa a las competencias de la Diputación