Vitoria. Las políticas sociales se han convertido en protagonistas de excepción en una campaña marcada por la crisis. El PNV no cree en recortes ni ampliaciones de plazos de empadronamiento para acceder a este respaldo económico siempre que sea necesario, pero sí apuesta por reforzar los cauces de control que impidan episodios fraudulentos. La receta se basa en añadir dos controles más al protocolo municipal en vigor: el de la economía sumergida y el de la búsqueda real de empleo por parte de las personas que reciben ayudas.
Así lo explicó el candidato jeltzale a la Alcaldía de Vitoria, Gorka Urtaran, quien junto con el aspirante a la reelección en la Diputación foral, Xabier Agirre, se desplazó ayer hasta la residencia de mayores Lakua para protagonizar un acto de campaña. Urtaran está convencido de que este refuerzo en el protocolo de vigilancia permitirá expulsar a los ciudadanos que se valen del fraude para cobrar ayudas, sin recortar los derechos sociales de las personas que cumplen los requisitos.
Pero además de dotar de contenido las políticas sociales y dibujar los ejes vertebradores, Urtaran también describió cuál es su modelo de ejecución de estas ayudas. Para empezar, estima que es necesario definir de forma meticulosa el reparto de los servicios que tiene que prestar cada institución con el fin de evitar "duplicidades, vacíos y sobrecostes". Y unido a este punto abogó por establecer una ventanilla única para que los servicios sociales sean la vía de acceso a toda la red de recursos de este área. La intención del PNV es que estas facilidades repercutan en beneficio, sobre todo, de los más desfavorecidos.
Sostenibilidad El lugar escogido para el acto en Lakuabizkarra no fue casual. Xabier Agirre recordó frente a estas instalaciones que se trata de la única residencia de mayores pública que se ha levantado en la capital alavesa en la última década. Estas respuestas a las necesidades de los mayores y la sostenibilidad de las políticas sociales figurarán en la lista de objetivos del equipo de gobierno de Agirre si consiguen reeditar su mandato en la Diputación, según aseguró el aspirante.
Ante este reto, el candidato jeltzale defiende tres principios básicos encabezados por el equilibrio territorial o, lo que es lo mismo, los mismos servicios de este ámbito para cualquier ciudadano alavés viva donde viva. El segundo pilar descrito por Agirre está vinculado a la oferta de mismas oportunidades para todos los habitantes del territorio, mientras que el dirigente jeltzale situó en tercer lugar la responsabilidad pública del ente foral para "asumir el compromiso de evaluar permanentemente los servicios y las prestaciones". Agirre recordó su compromiso de destinar a partir del próximo año el 40% de los Presupuestos forales al ámbito de políticas y servicios sociales.