vitoria. Que Bildu no esté en las elecciones por acción de la Justicia a instancias del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero "cuestiona la apuesta política del Gobierno español por aprovechar este momento". El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, fue ayer claro en un desayuno informativo que tuvo lugar en Madrid: la "responsabilidad" que llevó a los jeltzales a permitir la aprobación los Presupuestos Generales del Estado -y que evitaban el adelanto de las elecciones generales- también incluía un compromiso para aprovechar la oportundiad del "nuevo tiempo para Euskadi" que se ha abierto y que requería, algo que con la actitud del Estado ante Sortu primero y Bildu ahora, "se cuestiona", en palabras de Urkullu, aunque lo que haga falta ahora sea "colaboración, estabilidad y tiempo político".
Ante esta situación, el presidente del EBB advirtió que en la próxima negociación presupuestaria, la última de Rodríguez Zapatero antes de las elecciones que deberían ser en marzo de 2012, el PNV tendrá "muy-muy presente", porque el de la pacificación y el de la normalización política es una "cuestión mayor" para los jeltzales.
En esta línea, Urkullu albergó "la esperanza" de que "aunque sea en el último minuto antes de la jornada electoral próxima, la decisión judicial sea la de la posible participación de dicha sensibilidad ideológica".
Rubalcaba, a lo suyo Tras interpretar que el vicepresidente primero y ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, está actuando "para preservar su situación como supuesto candidato" a la presidencia del Gobierno -en pugna con Carme Chacón-, Urkullu explicó que el nuevo tiempo político para el que pide más al Ejecutivo español se debe al "giro copernicano" de la izquierda abertzale y al alto el fuego de ETA.