BILBAO. En una entrevista a Euskadi Irratia, recogida por Europa Press, Urizar ha destacado que no entra en sus cálculos la posibilidad de que Bildu sea ilegalizada, y ha añadido que, "con las declaraciones que están haciendo, parece que no se busca eso políticamente".

A pesar de ello, ha admitido que su formación se está "arriesgando", aunque ha asegurado que "merece la pena, porque sabemos qué camino estamos haciendo y que nos llevará a un nuevo ciclo político".

"Sabemos que existen movimientos policiales, y eso es denunciable. Nadie puede negar a Eusko Alkartasuna que, en sus 25 años, su apuesta siempre ha sido en favor de los derechos humanos y de actuar siempre tan sólo en el ámbito democrático, y alguien debería decirnos cómo se puede aceptar que la policía utilice seguimientos y métodos dudosos a un partido legal en una escenario democrático, para verificar sus pruebas o sospechas", ha reiterado.

El dirigente abertzale ha indicado que, tanto la Fiscalía General del Estado, como el Ministerio de Interior y los tribunales, están "en el mismo equipo y los vemos como aparatos del Estado", y ha destacado que, "si hay algo incómodo para el Estado español, eso es crear en Euskal Herria un movimiento soberanista potente".

"Sabemos que los mensajes que envían Rubalcaba y otros son parte del papel que juegan y para poner nerviosos a otros -ha dicho-. Pero nuestro objetivo no es aumentar el espacio de ilegalización, y nuestro compromiso para actuar dentro de la legalidad es claro. Sabíamos que iban a mirar nuestras listas con lupa y hasta con microscopio, pero estamos muy tranquilos, porque sabemos que cumplimos lo que hay que cumplir y que lograremos nuestro objetivo, es decir, llevar el movimiento soberanista a las instituciones".

En este sentido, ha explicado que las instituciones son "un instrumento imprescindible" para mantener "una confrontación democrática" con los estados español y francés, "porque creemos que Euskal Herria tiene derecho a ser una nación y un estado, y para eso sabemos que seguramente se va a dar una confrontación con los estados, ya que no tienen voluntad para aceptar eso".