Vitoria. PSE, PP y UPyD unieron ayer sus votos para sacar adelante una iniciativa en el Parlamento Vasco en defensa del papel de las víctimas ante un eventual final de ETA. La proposición, negociada entre socialistas y populares a partir de un texto de los conservadores, dice que "la paz no tiene precio político", exige que se escuche la voz del colectivo y respalda el documento de bases firmado en noviembre por la mayoría de las asociaciones de víctimas.
Y aunque ese texto marca a los poderes públicos los límites que tolerarán las víctimas, la iniciativa aprobada ayer en el Parlamento deja claro que "la competencia para conseguir terminar con el terrorismo y abordar su final corresponde a los representantes de la ciudadanía democráticamente elegidos".
Ningún grupo pone en duda en el Parlamento que las víctimas han de ser tenidas en cuenta cuando se dé carpetazo al terrorismo, o que las decisiones las han de tomar los políticos. Sin embargo, fue el apoyo a esa toma de postura de las víctimas el que abortó una posible unanimidad.
PNV y Ezker Batua querían votar por puntos para evitar respaldar un documento que el portavoz jeltzale, Joseba Egibar, calificó de "manifiesto político", pero el PP lo impidió. "No puede haber impunidad judicial", denunció el popular Carlos Urquijo, en referencia a la política penitenciaria, y acusó al PNV de utilizar "artimañas políticas" para no tener que respaldar la iniciativa de PSE y PP. Egibar, por contra, afirmó que el PP pretende marcar la "hoja de ruta" al Parlamento.
Mientras el socialista José Antonio Pastor afirmaba que la transacción entre los socios perseguía "trasladar el acuerdo entre las víctimas a las fuerzas políticas de Euskadi", desde Aralar Mikel Basabe reprochaba que se busque el consenso en un Parlamento que "está haciendo un trabajo largo y fructífero con las víctimas.
Desde EA, Juanjo Agirrezabala aseguró que el PP "no quiere conseguir la paz ni la normalización" y el portavoz de UPyD, Gorka Maneiro, destacó que "la debilidad de la banda no es fruto de la casualidad, sino de la actuación decidida del Estado de derecho".
