Pamplona. Eusko Alkartasuna mostró ayer su malestar por el anuncio de Aralar, PNV e independientes de que van a comenzar a preparar sin la participación de EA el proyecto electoral con el que concurrirán a las elecciones forales y municipales del próximo mes de mayo. "Exigimos su paralización inmediata en tanto en cuanto no se exploren todas las vías de resolución", reclamó ayer su secretario territorial en Navarra, Maiorga Ramirez, que emplazó a una nueva reunión al resto de socios para intentar llegar a un acuerdo, y que se mostró dispuesto además a suscribir un nuevo documento con la coalición si este es "genérico" y afecta a todos los partidos. Posibilidad que sin embargo rechazaron el resto de socios, que se mantienen firmes en su exigencia a EA para que firme un compromiso "claro" con NaBai para el periodo 2011-2015 y deje sin efecto toda afección a Navarra que puedan tener sus acuerdos con la izquierda abertzale.

Era la respuesta a unos socios que la víspera habían anunciado su intención de poner en marcha la maquinaria electoral sin uno de sus miembros, y que ya han hecho pública la candidatura de Nafarroa Bai de Irurtzun. Algo que no ha gustado en EA, que insiste en que sigue siendo una parte "esencial" de la coalición, y que está comprometida "electoral e institucionalmente de manera exclusiva" con NaBai, y que ayer respondió con otra carta al resto de sus socios, en la que advierte de que "pretender expulsar a EA es tanto como renunciar al cambio político en Navarra".

En la misiva, de la que ayer dio lectura pública su secretario territorial en Navarra, Maiorga Ramirez, EA recuerda que ya está acordado el "núcleo de la coalición", en referencia a las bases organizativas, políticas y programáticas para el periodo 2011-2015, por lo que "no existe ninguna razón para negar la colaboración de Eusko Alkartasuna". "No es de recibo, y a nuestro juicio denota una gran irresponsabilidad, que exigencias sobrevenidas planteadas a última hora se conviertan en la excusa de PNV, Aralar e Independientes para dinamitar la coalición", asegura EA, que pide "respeto" para las dinámicas propias de cada partido, y apela a la "responsabilidad" para "priorizar el cambio político y la necesidad de aglutinar el voto abertzale para ganar a la derecha". "EA prioriza el cambio político en Navarra frente a la discrepancia que mantenemos con los acuerdos del PNV con el PSOE en Madrid y que inciden directamente, por ejemplo, en las pensiones de los navarros", reprochó Ramírez, que en cualquier caso insistió en "explorar todas las vías de resolución".

Urizar critica a PNV y Aralar Pero la fractura entre EA y el resto de socios cada día es más evidente, aunque de momento ninguna de las partes quiera dar por rotas las relaciones. En cualquier caso, el cruce de reproches continuó ayer. En esta ocasión de la mano del secretario general de EA, Pello Urizar, que culpó a PNV y Aralar de una situación "no deseada, a quienes acusó de "maniobrar" para expulsar a su partido de la coalición. Algo que atribuyó a motivos "claramente partidistas", y tras los que dijo ver "un camino marcado para expulsar a EA". "Pretenden mutilar NaBai quebrando el espíritu de la coalición, y negando su carácter abierto a todos los demás abertzales que quieran y puedan. La política de acumulación de fuerzas está poniendo nerviosos a UPN, al PP, al PSN y al PSE, pero también, a PNV y Aralar", subrayó Urizar, que consideró que Zapatero "ha encontrado un socio fiel en el PNV", mientras que Aralar se ha convertido "en el compañero inseparable del PNV", un papel que, dijo, "no entiende buena parte de su militancia".

En la línea de lo expuesto por la asamblea nacional del partido el pasado martes, Urizar insistió en que NaBai es la "apuesta electoral exclusiva de EA", pero denunció las "condiciones sobrevenidas y accesorias" que el resto de socios han planteado "ad hoc" para Eusko Alkartasuna, y que "afectan directamente a la soberanía del partido". En ese sentido, Urizar reiteró que EA no renuncia a sus "acuerdos estratégicos" con la izquierda abertzale, una actitud que a su juicio es "absolutamente compatible con una NaBai abierta, plural e integradora".

el mismo requerimiento Las explicaciones de EA, en cualquier caso, no convencieron a sus socios de coalición, que ayer descartaron paralizar los preparativos electorales y volvieron a exigir a EA un compromiso de que sus acuerdos con Batasuna no afectarán a NaBai. "Los planteamientos de EA no aportan novedades, y NaBai ya ha dicho lo que tenía que decir", aseguró ayer en declaraciones a Efe el coordinador de Aralar en Navarra, Txentxo Jimenez, que señaló que los términos de la carta enviada la víspera a Urizar no han cambiado. "NaBai para las elecciones está constituida y ese documento es un contrato que si alguien no lo firma, no lo firma, pero se mantiene", subrayó Jiménez, que recordó que los otros tres socios han firmado el mismo documento.

En términos similares se posicionó también el presidente del PNV, José Ángel Agirrebengoa, que consideró que "no hay marcha atrás porque las cosas tienen un límite". "Lo de Batasuna es unánime y clave cuando su misión es dinamitar NaBai", defendió el dirigente nacionalista, que vio "una torpeza" que EA muestre su preocupación por las listas electorales. Por su parte, la portavoz de los independientes, Uxue Barkos, reconoció la "legitimidad y soberanía" de EA para tomar sus propias decisiones, pero también recordó que el texto planteado en el seno de NaBai es "muy claro".