madrid. Amnistía Internacional (AI) confirmó ayer que en los disturbios en El Aaiún tras el desmantelamiento del campamento saharaui de protesta hubo heridos de bala y muchos de los detenidos fueron torturados. La investigadora Donatella Rovera indicó que, según su investigación, realizada en El Aaiún entre los pasados 24 y 30 de noviembre, "ha habido tres o cuatro casos de heridos de bala de goma durante el desmantelamiento, y otros tres o cuatro de heridos de bala de fuego posteriormente, a las afueras de la ciudad, en circunstancias confusas".
Tras haber regresado de la capital administrativa del Sahara Occidental, Rovera permanecerá en Rabat hasta mañana y preparará un informe sobre los altercados, en el que la cifra de muertos de la que AI dispone coincide con la de las autoridades: once agentes de las fuerzas de seguridad y dos civiles saharauis.
Rovera se entrevistó en El Aaiún con las autoridades locales, con detenidos saharauis que fueron liberados o se encuentran en libertad provisional, con familiares de algunos arrestados o con testigos presenciales de los disturbios del pasado 8 de noviembre.
seguimientos Ella y otro experto de AI realizaron su trabajo "sin presiones", asegura, pero fueron seguidos "a todas horas de manera muy clara" y no pudieron acceder a la conocida como la Cárcel Negra de El Aaiún ni visitar a heridos en el Hospital Militar, donde calcula que todavía hay "tres o cuatro personas". Según sus datos, "la mayoría de los liberados dijeron haber sido golpeados, incluso de manera muy fuerte, por lo que se puede decir que fueron torturados".
La organización calcula que hay detenidas 130 personas, de las cuales 118 están en El Aaiún y serán juzgadas por el Tribunal Penal de la ciudad, y otras 12 han sido trasladadas a Rabat y serán presentadas ante una corte militar.