El juicio en París contra el supuesto ex jefe político de ETA, Mikel Albisu, Mikel Antza, y su compañera y presunta ex responsable de finanzas de la banda, Soledad Iparragirre, Anboto, entró ayer en su segunda semana. El tribunal retomó el proceso interrogando a Robert Arrambide, un ex concejal de Hendaia de 68 años en cuya casa se encontró un arsenal de armas, y desde hoy abordará el de los principales acusados, Antza y Anboto, para los que la Fiscalía pide penas de hasta 30 años de cárcel.