independentistak aborda hoy su salto a una nueva fase de su estrategia con la que pretende tejer una red que extienda la reivindicación en defensa de la creación de un Estado vasco dentro de Europa sumando esfuerzos por encima de las adhesiones partidistas de cada ciudadano.
El colectivo se presentó en sociedad el pasado 27 de febrero, cuando anunció la puesta en marcha de un calendario de iniciativas de entre las que destacaba el impulso de una ola verde destinada a hacer visible la reivindicación independentista aprovechando especialmente las fiestas patronales del verano vasco. Sin embargo, sus actividades a lo largo de estos nueve meses no han pasado de la convocatoria de un Aberri Eguna unitario -que sólo contó con el apoyo de la antigua Batasuna, EA y una delegación de Aralar- y una marcha coincidiendo con el Día de la Hispanidad en la que reivindicaron el derecho a decidir de la sociedad vasca.
relación con los partidos La capitalización del papel de vanguardia de este tipo de iniciativas ha sido una querencia constante en la historia política vasca, acusada especialmente en los movimientos del ámbito de la izquierda abertzale tradicional. Ante este riesgo, Independentistak advierte -al menos en sus principios fundacionales- de que si bien "tiene voluntad de trabajar con los demás agentes", lo hará sólo "cuando se respete" su identidad y "no se arrincone" su apuesta.
Sin embargo la ralentización del ritmo de los trabajos que tenían previsto haber ayudado a convertir este año en un verdadero "punto de inflexión" en la lucha por la independencia, y su relación con el lento avance de procesos más o menos paralelos como la suma de fuerzas que persigue el polo soberanista a nivel de los partidos, o la solución del culebrón legal que marca el futuro legal de Batasuna en esta marea electoral, demuestra que la red tendrá que apuntalar aún su apuesta ciudadana para no verse lastrada por estas dinámicas partidistas aún imperantes.
Para hacerlo, apuesta por incidir en el trabajo participativo de sus miembros, que trabajarán aprovechando la inmediatez que ofrecen las actuales redes informáticas sociales para compartir ideas, críticas o propuestas de la forma más libre posible de raseros ajenos.
En este sentido, Independentistak volverá a conjurarse en el acto de hoy para subrayar como el "más preciado tesoro" la pluralidad de "tradiciones y sensibilidades" políticas desde las que esperan lleguen sus miembros y que se compromete a respetar por todos los medios para que sea posible el trabajo común.
la paz como apuesta y exigencia La red nace con un fin evidente: lograr "la independencia de Euskal Herria" que presenta, no como un proyecto "caduco", sino como el que más futuro ofrece a los vascos para relacionarse con los "demás pueblos" siendo "dueños de sí mismos".
Para lograrlo, Independentistak subraya que su apuesta es crear un movimiento que utilizará únicamente "medios democráticos y pacíficos" y, en este sentido, advierte de que "exigirá" la adhesión a estos mismos principios "a todos aquellos que sustenten sus proyectos nacionales" en Euskal Herria dejando todo el protagonismo en la decisión de los ciudadanos como única vanguardia admisible.
Asimismo, aboga por un escenario presidido por unas reglas "justas" y en el que se puedan defender todas las ideas "en igualdad de condiciones" y sin "ningún tipo de amenaza ni imposición", marcando así las preceptivas distancias con aquellas estrategias violentas que se han ligado durante demasiados años al conjunto del independentismo vasco, y apostando por un camino forjado a base de "acuerdos" entre las partes, aunque para alcanzarlos plantea también poner en marcha dinámicas basadas, por ejemplo, en la "desobediencia civil".
Así, quienes acudan al acto que Independentistak celebra hoy en la Facultad de Psicología de la UPV en San Sebastián, se encontrarán un escenario teñido de verde -el color de la esperanza que quieren convertir en su bandera- del que saldrá elegida una coordinadora compuesta por 25 personas que la red espera dotar de un perfil plural que represente los diferentes matices ideológicos, sociológicos y profesionales a los que aspiran a dar cabida para afrontar en los próximos meses el reto de impulsar la defensa del independentismo a base de músculo puramente social.