BILBAO. El lehendakari, Patxi López, ha rechazado la paradoja "sangrienta" de ETA y su entorno al apelar a la Declaración de Derechos Humanos y ha asegurado, ante esta postura, que "no hay mayor incompatibilidad".
En su intervención, ha destacado que "ser persona es el único título legitimador de derechos", ya que es "una afirmación universal". "Por eso, el antagonista absoluto de los derechos humanos fue Auschwitz porque el crimen no fue el asesinato masivo que se dio, sino la negación de la condición humana de los asesinados", ha agregado.
Según López, "sólo el sistema democrático ha podido defender los derechos humanos y, a la vez, crear las instituciones políticas necesarias para solicitar aplicación y defensa". "En la dictadura, cuando reclamábamos derechos humanos, estábamos reivindicando un sistema democrático capaz de defenderlos", ha añadido.
En este sentido, ha advertido que el "divorcio" entre los derechos y la política, es decir, "alejar los derechos de los sistemas políticos concretos como si no tuviera que ver, produce extrañas paradojas".
"ETA Y SU MUNDO"
El lehendakari ha asegurado que "hay paradojas que se convierten en sangrientas como en Euskadi", donde "ETA y su mundo" reivindican la Declaración de derechos humanos como un principio "legitimador" de su propia "acción política". "¿Cómo puede ser posible esto? Si no hay mayor incompatibilidad", ha destacado.
En este sentido, el lehendakari ha insistido en que los derechos humanos surgen como "principio legitimador y guía" de sistemas políticos democráticos, y ha advertido que es "obligación" de los poderes públicos su cumplimiento, aunque, "a veces, tengamos problemas, como, en nuestro caso, que el derecho a la vida está siendo atacado por el terrorismo".
EXPULSIONES EN FRANCIA
"Y hay, a veces, también que son los propios poderes públicos los que, renunciando a su responsabilidad, abandonan la defensa y el cumplimiento del derecho a la vida y a la libre expresión", ha censurado.
Al respecto, ha señalado que las expulsiones "forzadas" de gitanos de Francia es un hecho que "nos rebela los problemas que estamos teniendo en Europa a la hora de reconocer los derechos de los ciudadanos no nacionales".
DERECHOS SOCIALES
López ha explicado que la década de los 90 fue "abundante" en las reivindicaciones y en la consecución de los derechos sociales y ha indicado que este bloque de derechos "se refiere al ámbito de la igualdad", puesto que en la medida de que son derechos materiales "deben su existencia a la solidaridad interna de la ciudadanía".
Además, ha advertido que estos derechos tiene dos riegos como son el "fraude fiscal" y el "fraude en el abuso de servicios de ayudas" que "hay que compartir por igual para mantener los derechos de todos".
"La solidaridad siempre ha tenido una brecha, la solidaridad con los otros. Las masas empobrecidas de los país subdesarrollados están fuera de las solidaridad ciudadana de los países ricos, más allá de la aportación del 0,7", ha criticado.
López ha explicado que en Europa existe la paradoja de que "mientras estamos concretando un nuevo catálogo de derechos sociales, tenemos dificultad para garantizar los viejos derechos del Estado de Bienestar".