Vitoria. La izquierda abertzale cuenta con el visto bueno tanto del Departamento de Interior del Gobierno Vasco como de la Audiencia Nacional para llevar a cabo la concentración que reclamará hoy a las 12.30 horas en la plaza Zabalburu de Bilbao "los derechos de Euskal Herria", pero no con el del PP.
Ayer el juez Eloy Velasco dio su autorización para la celebración del acto y pidió a la Ertzaintza que garantice que éste se desarrolle según los cauces establecidos por la Ley de Partidos. Poco antes, el consejero de Interior, Rodolfo Ares, afirmaba en Radio Euskadi que la concentración respeta la legalidad vigente y confirmaba que, tal y como pide la Audiencia Nacional, la Policía supervisará su desarrollo.
El precedente de la manifestación de Donostia del pasado día 14, en la que no hubo incidentes, ha llevado tanto a la Justicia como al Ejecutivo vasco a dar vía libre a los convocantes. Sin embargo, para el PP, el hecho de que "los amigos de ETA" puedan salir a la calle a manifestarse no es sino "un nuevo subterfugio de Batasuna para intentar eludir su situación de ilegalidad".
Así lo dijo su parlamentario Carlos Urquijo, para quien "no es de recibo que cuando llevamos más de un año ya aplicando con éxito la fórmula de tolerancia cero con quienes no respetan las reglas de juego democráticas, se dé un paso atrás en esta política". Por eso, abundó en su crítica contra el Gabinete López al asegurar que la autorización del acto es "un error que será interpretado por ese mundo como un síntoma de debilidad".
Urquijo reiteró que "ETA no sólo son sus comandos", por lo que, en su opinión, "no es suficiente" decir que la concentración "no interferirá en el desarrollo de las fiestas, sino que es necesario tener en cuenta quién lo convoca". En este sentido, el parlamentario popular acusó al "mundo radical" de "utilizar las fiestas para lograr un protagonismo que sólo pueden conseguir intentando reventar el ambiente festivo de la ciudad", y por ello instó a Interior a que "sea suficientemente diligente para terminar con esta burla de la ley en cuanto se escuche el primer grito de apoyo a ETA o aparezca el primer cartel de apoyo a los terroristas".
Fisuras Urquijo es precisamente el miembro del PP vasco que ha puesto rostro a las escasas fisuras del acuerdo de bases con los socialistas en materia de deslegitimación del terrorismo, y ayer volvió a hacerlo, pese a que las palabras de Ares no eran precisamente condescendientes con la izquierda abertzale. El consejero de Interior opinó que los convocantes decidieron celebrar una concentración en lugar de una manifestación porque el recorrido alternativo planteado por Lakua les obligaba a "medirse con el tamaño de la calle Autonomía". Según Ares, este sector "confía poco en su capacidad de movilización" y por eso rechazó el recorrido alternativo propuesto por Interior frente a su propuesta inicial. De ahí, según el consejero, que se haya optado por la fórmula de la concentración, que ayer fue autorizada por el juez Velasco atendiendo a la petición de la Fiscalía.