vitoria. Patxi López sigue buscando una posición en la que guarecerse para que las negociaciones que ya exploran el PNV y sus compañeros del PSOE en el Congreso de cara a la aprobación de los Presupuestos del Estado no le desairen.

Hace una semana, algunos de los llamados barones socialistas -dirigentes a los que se les supone un peso específico en el partido- alzaron su voz para evitar que López se convirtiera en un convidado de piedra de este proceso y que, en consecuencia, su papel quedara aminorado por el protagonismo que volverían a tener los codiciados diputados jeltzales en este tipo de negociaciones con quien ostenta el poder en el Estado. Así lo hicieron el presidente de Castilla La Mancha, José María Barreda -siempre crítico con el peso de los nacionalismos-, y el secretario general del Partido Socialista de Madrid, Tomás Gómez -cuya candidatura apadrinó el lehendakari bajando incluso a Madrid para avalar su designación como líder de los fatigados socialistas madrileños-. Barreda aseguró que "no se puede prescindir" del lehendakari en estas conversaciones, y Gómez, que no le cabría "en la cabeza otro escenario" que aquél en el que López fuera, al menos, coprotagonista.

Ayer, durante la comparecencia ante los medios que realizó en Bilbao, el dirigente vasco se vio obligado a pronunciarse sobre esta reivindicación de su papel que hicieron públicamente sus dos compañeros.

"Están preocupados por una situación en la que el Gobierno y el PSOE pueden demostrar más fortaleza, porque la tienen", explicó López, para quien lo que en realidad "hace falta" es hacer "presente" esa fuerza para evitar situaciones incómodas; tanto para él, como para el conjunto del partido, que ya sufre el acoso de PP y UPyD antes incluso de empezar a negociar.

utilizar "las piezas" El lehendakari adelantó también cómo pueden sus compañeros sacar ese músculo que les pide que muestren. "El PSOE tiene muchas piezas" para hacerlo, dijo, "empezando por el presidente del Gobierno, el Consejo de Ministros, la Ejecutiva Federal y cantidad de compañeros al frente de Comunidades Autónomas o Ayuntamientos". "Lo que hay que hacer es usar todo eso para que el mensaje socialista y las acciones del Gobierno y del PSOE se entiendan y sean más comprendidas", porque "quizá", apuntó, "podamos tener un déficit de que entiendan lo que estamos haciendo" y es necesario "contarlo y contarlo bien".

Sin embargo, en lo que no quiso entrar fue en la polémica que se ha abierto en la federación madrileña del partido, donde se preparan ya para celebrar unas elecciones primarias de las que saldrá el próximo rival -o la próxima rival- de la popular Esperanza Aguirre.

López se limitó a asegurar que con estos comicios el PSOE dará "un ejemplo de democracia" mientras que en otros partidos los candidatos "se eligen digitalmente, a dedo". "En el PSOE somos los militantes los que decidimos quién nos representa", subrayó evitando tomar partido por Gómez o por Trinidad Jiménez.