roma. El Gobierno del transalpino Silvio Berlusconi logró ayer salvar con una mayoría simple la moción de censura presentada por la oposición contra el subsecretario de Justicia, Giacomo Caliendo, en la que supuso la primera prueba de estabilidad del Gabinete tras la escisión del partido gobernante Pueblo de la Libertad (PDL).

El citado grupo de Pueblo de la Libertad logró superar la prueba precisamente gracias a la abstención de los diputados del nuevo grupo Futuro y Libertad para Italia (FLI), formado por Gianfranco Fini, recién expulsado del partido de Berlusconi.

Tras un agitado debate, la Cámara Baja rechazó en presencia de Berlusconi la moción de censura, planteada por los opositores Partido Demócrata (PD) e Italia de los Valores (IDV), con 299 votos en contra, 229 a favor y 75 abstenciones, en un pleno en el que 316 diputados son los que conceden la mayoría absoluta.

La moción contra Caliendo había sido presentada tras conocerse que estaba siendo investigado por las sospechas de que pertenecía a una sociedad secreta conocida como P3, que pretendía influir en las decisiones políticas y judiciales.

En cambio el ministro de Justicia, Angelino Alfano, recalcó en el parlamento que su Gobierno se opone a la censura, entre otras razones, por el derecho de Caliendo a la presunción de inocencia y porque el asunto de la trama en cuestión es invención "de fiscales y de la izquierda".

Por su parte, el líder de la formación Italia de los Valores, Antonio di Pietro, aseguró que la moción de censura se presentó, entre otras razones, por el "bien del país, para que Berlusconi y su Gobierno no sigan en pie ni un sólo minuto más".

Las abstenciones de Futuro y Libertad para Italia, y de otros grupos minoritarios, permiten que la crisis gubernamental no se agrave justo antes del parón veraniego, pero tensa el futuro del Ejecutivo en futuras votaciones.