madrid. Nada menos que 33 segundos permanecieron los diputados socialistas aplaudiendo al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tras la defensa que éste hizo ayer en el Congreso de su papel al frente del semestre de la Presidencia española de la UE. Pero los socialistas se volvieron a quedar solos. Ninguno de los demás grupos avaló la labor de Zapatero durante este periodo y todos coincidieron en asegurar que los retos que se había marcado, no se han cumplido.
Abrió el fuego Rajoy censurando que los seis meses de Presidencia española han dejado al país con la "economía intervenida" y en situación de "protectorado". "Hemos terminado con una economía intervenida desde el exterior, un protectorado establecido porque los socios europeos no se fiaban de su modo de gobernar", afirmó el líder de los populares dirigiéndose a Zapatero. "Pensaba escribir un guión europeo y al final otros se lo han escrito a usted", añadió.
A la hora de desgranar "el ramillete de frustraciones", Rajoy destacó la suspensión de la cumbre con Estados Unidos, después de que se hubiera afirmado que sería un "acontecimiento planetario", y la de la Unión por el Mediterráneo. También consideró un "fracaso, por fortuna", el que no se haya logrado cambiar la posición común de la UE con Cuba, y el "ridículo" de tratar de imponer en Europa la orden de protección de las víctimas de la violencia de género. Además mostró su preocupación por que el Gobierno no haya preparado la revisión de la política agraria.
Para el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, el balance de estos seis meses supone un "rotundo fracaso" si se compara con la "grandilocuencia" que los socialistas hicieron sobre el éxito de esta etapa. "Pretendieron sacar demasiado jugo interno", señaló. El "problema", insistió, "no es tanto lo que se ha hecho como lo que se dijo que se haría y no se hizo", lo que pone en "evidencia" la "retórica desmesurada" del PSOE sobre "acontecimientos planetarios".
Por parte del PNV, Josu Erkoreka, tildó de "agridulce" el balance de la presidencia española. En su opinión, la "expectación" que generó la entrada en vigor del Tratado de Lisboa "se ha trocado en desconfianza". "Nadie sabe, en definitiva, si Europa crece o cede; si progresa o se arruga", señaló.
El portavoz de ERC, Joan Ridao, opinó que el semestre ha quedado "deslucido" frente al contexto económico "intervenido" por una Europa que "exige constantes ajustes".
Frente a esto Zapatero afirmó que el Gobierno se ha sentido "útil" durante la presidencia rotatoria de la UE y destacó el "firme" apoyo de los socios y las instituciones comunitarias al "esfuerzo" de España para adoptar las medidas "necesarias" ante la crisis.