La izquierda abertzale tradicional y EA firmaron ayer un acuerdo estratégico por el que ambas formaciones se comprometen en trabajar por la creación de Estado vasco independiente, para lo que abogan por el "uso de vías exclusivamente políticas, pacíficas y democráticas y la defensa de todos los derechos humanos". El acto celebrado en el Palacio Euskalduna de Bilbao bajo el lema Lortu Arte [Hasta conseguirlo] finalizó con la firma del acuerdo entre representantes de ambas formaciones, seis por cada lado, encabezados por Pello Urizar, secretario general de EA, y Rufi Etxeberria, militante histórico de la izquierda abertzale histórica.

Ni en el propio documento de quince páginas, ni en las casi dos horas y media que duró el acto, hubo alusión alguna a ETA. Quienes acudieron con la idea de que en el Palacio Euskalduna se iba a producir una condena explícita a la organización armada, debieron salir decepcionados. Sin embargo, en el documento suscrito por ambas formaciones se señala que "el conflcito político ha traído violencia y, por desgracia, las expresiones de violencia y sufrimiento siguen presentes". Tras reconocer que la raíz del conflicto es político y que las soluciones deben ser políticas, tanto EA como la izquierda abertzale tradicional se comprometen "con el uso de las vías exclusivamente políticas y democráticas".

Asimismo, ambas formaciones abogan por un proceso de diálogo multipartito en base a los Principios Mitchell y en particular se refieren a dos puntos: "compromiso exclusivo con las vías pacíficas y democráticas y compromiso a renunciar el uso de la violencia y el rechazo a todo intento por otros al uso de la fuerza, o a la amenaza de usarla, para intentar influir en el curso o resultado de las negociaciones multipartitas".

Este llamamiento al uso de "vías políticas" tampoco resulta ninguna novedad estas alturas por cuanto EA siempre se ha mostrado contraria al uso de la violencia y por lo que respecta a la izquierda abertzale, tanto en Altsasu, Iruñea o en el documento Zutik Euskal Herria, producto del debate interno de sus bases, ya se hizo referencia a las vías "políticas y democráticas".

En el documento se exige la derogación de la Ley de Partidos, y el "establecimiento de medidas que solucionen las situaciones ilegítimas que actualmente se padecen en las instituciones públicas".

escenario en naVARRa El texto, bajo el epígrafe de Bases para el acuerdo estratégico entre fuerzas políticas independentistas, asegura que tanto EA como la izquierda abertzale proceden de "tradiciones, experiencias y actuaciones políticas distintas e, incluso, en ocasiones contradictorias". Desde estos diferentes puntos de partida, EA y la izquierda abertzale señalan que los actuales marcos jurídico-políticos -Estatuto de Autonomía, Amejoramiento Foral y la situación en Iparralde- están agotados, por lo que consideran imprescindible "un cambio político sustentado en el reconocimiento nacional y respeto a la voluntad popular".

Según el documento aprobado y suscrito por ambos, el objetivo principal del acuerdo es la "constitución de un Estado vasco independiente en un escenario internacional pleno de interdependencias políticas y económicas". Tras asegurar que la constitución del Estado vasco no va contra nadie, "no queremos muros en el Ebro o el Aturri", EA y la izquierda abertzale exigen que los ciudadanos vascos puedan ejercer el Derecho a la Autodeterminación.

A lo largo de las jornadas previas a la presentación de este acuerdo, el tema de Nafarroa ha sido uno de los puntos más espinosos, por cuanto EA es socio de Nafarroa Bai, donde comparte estrategia en la Comunidad Foral con Aralar, PNV, Batzarre e independientes. El documento firmado ayer asegura que "el sujeto destinatario del acuerdo es el conjunto de los territorios vascos que configuran Euskal Herria, por lo que tiene un ámbito nacional". Sin embargo, a continuación se señala que "esta dimensión nacional se desarrollará siendo conscientes de los distintos ritmos en los diferentes territorios y marcos de decisión y, por ello, tenemos intención de responder a los mismos desde el respeto y protección de las diversidades".

El texto va más allá a la especificidad propia de Nafarroa y señala que "el Amejoramiento ha tenido secuestrar la voluntad de los y las navarras. Por medio de este acuerdo mostramos nuestro compromiso por trabajar para alcanzar un nuevo escenario que no ponga límite alguno a la voluntad de la ciudadanía navarra".

suma de fuerzas El documento está abierto a que nuevos agentes políticos suscriban lo que en él se recoge, puesto que los firmantes muestraron su voluntad de suma de fuerzas progresistas.

Aunque en algunos sectores se había especulado con una posible invitación concreta a Aralar y Alternatiba para que sumen a este denominado polo soberanista, no hubo una referencia clara a ambas formaciones, pero sí se aseguró, sin embargo, que "la acumulación de fuerzas que deseamos los y las independentistas necesita de expresiones concretas. Mostramos la adhesión a las iniciativas populares que surjan a favor de la independencia, con absoluto respeto en todo caso con su naturaleza y dinámica".

Si, tal como se ha señalado, a lo largo de las bases acordadas ayer no hay ni una sola referencia explícita a ETA, por lo que respecta a los próximos compromisos electorales -comicios municipales y forales de 2011-, EA y la izquierda abertzale tradicional consideran necesario, "impulsar fórmulas electorales que permitan esa acumulación de fuerzas y el desarrollo de los objetivos marcados en el presente acuerdo".

El acuerdo finaliza insistiendo en su compromiso a desarrollar una estrategia basada en la "confrontación cívica, pacífica y democrática", ya que consideran que su mayor fuerza será la adhesión popular para poder avanzar.