vitoria. El eurodiputado del PP Jaime Mayor Oreja continua con la campaña que le ha devuelto al primer plano de la política alzando la misma bandera que le llevó a ser la mano derecha del presidente Aznar. Así, a pesar de los desmentidos que se esfuerzan por hacer día tras día los más destacados dirigentes del PSOE y del propio Gobierno, Oreja reiteró ayer, en Telecinco, que ETA y los socialistas tratan de engañar a los ciudadanos ocultando la negociación que están manteniendo gracias a una "teatralización conjunta". "Sería mucho más fácil que el Ejecutivo dijera la verdad" y que declarara que quiere "negociar como lo hicieron los irlandeses del norte"; que quiere llevar a cabo "un proyecto de resolución de conflictos", espetó. "Lo malo es engañar a los españoles. Decir lo que no se está haciendo y hacer lo que no se está diciendo", concluyó.
Para el dirigente popular, la hoja de ruta hacia un final dialogado está escrita y no deja dudas. A su juicio, la izquierda abertzale, dijo, está haciendo "todo lo indecible" para estar presente en las elecciones de 2011, y "en los próximos días" va a haber una declaración de la izquierda vasca o de la propia ETA en la que volvió a vaticinar que se van a "dar pasos" para "preparar todo esto", como a su juicio ha empezado a hacer el sindicato LAB en el acto del pasado fin de semana.
Una vez que "todo esto" esté preparado, Oreja reiteró que tiene por seguro que Aralar -a quien se refirió como "un grupo que estaba extinguido" pese a sus continuos ascensos electorales-, ha dado también un paso decisivo para ser, junto con EA, "la pista de aterrizaje" en la que tomen tierra un conjunto de personas "que van a venir de la izquierda vasca, que en el fondo es ETA".
la reflexión política Ante estas declaraciones, la otra cara de la moneda volvió a ser ayer la del coordinador general de Aralar, Patxi Zabaleta, quien también abordó los temas sobre los que vaticina Oreja.
Zabaleta alimentó las hipótesis del europarlamentario la semana pasada cuando anunció que su formación y la ilegalizada Batasuna habían dado un paso importante en la normalización de sus relaciones. Sin embargo, reiteró que la "iniciativa política" será la base del fin de ETA, y éste, como explicó el pasado jueves, sería a su vez el origen de un nuevo tiempo en el que quizá cupiera esa colaboración.
Para Zabaleta el origen de ETA fue político y la historia ha demostrado que las actuaciones policiales y judiciales "pueden frenar la actuación" de la banda "pero no erradicarla". Por eso, explicó que, aunque espera de ella un "cese unilateral" de su violencia sin contraprestaciones, "la única manera efectiva" de garantizar este escenario es que la sea propia organización quien decida abandonar la violencia a través una reflexión política de todos sus órganos internos.