Bogotá. Tras el resultado electoral del domingo en Colombia, en el que los ciudadanos dieron su claro apoyo al candidato oficialista que, sin embargo, tendrá que disputarse la Presidencia en segunda vuelta con el candidato del Partido Verde, Antanas Mockus, todos los partidos políticos empiezan a mover sus fichas de cara a futuras alianzas. Desde que se conoció el triunfo de Santos en la primera vuelta electoral -se quedó a sólo cuatro puntos de la mayoría absoluta-, las formaciones políticas se han sumergido en un proceso de debate para definir sus posturas: apoyar a Santos, a Mockus o, simplemente, dejar que sus simpatizantes elijan su voto.
Las alianzas con vistas a la segunda vuelta electoral comenzaron a definirse ayer, con los primeros pronunciamientos de apoyo a Santos surgidos entre conservadores y liberales y las dudas de la izquierda sobre su respaldo a Mockus. El portavoz de los parlamentarios conservadores, Carlos Alberto Zuluaga, anunció el "respaldo total" del grupo al candidato oficialista. El Partido Conservador, la segunda fuerza mayoritaria en el Congreso, y la población que lo sigue "quieren la continuidad de las políticas de Uribe", enfatizó Zuluaga. También entre las filas liberales se prefiere a Santos y, según el diario El Tiempo, ya existe una carta de varios parlamentarios en la que piden a la directiva del partido que apoye oficialmente al ex ministro.
Mientras, el ya ex candidato presidencial del Partido Liberal, Rafael Pardo, reiteró ayer que sus votantes tienen "libertad" para unirse en segunda vuelta al aspirante que prefieran. También pidió a Santos que aclare la propuesta de formar un gobierno de "unidad nacional" que realizó el domingo tras conocer su holgada victoria en la primera vuelta. En unas elecciones en las que arrasó Santos, los conservadores y liberales, que han dominado la política colombiana durante 150 años, fueron los grandes derrotados, ya que sólo obtuvieron el 6,14% y el 4,38% de los votos. Mientras, el izquierdista Polo Democrático Alternativo, la cuarta fuerza, adelantó que lo único en lo que hay consenso en el partido es en no apoyar a Santos, pero persiste el debate sobre si votar en blanco, abstenerse o apostar por Mockus. Más allá de alianzas, al Partido Verde también le hace falta un replanteamiento de la campaña. "Tenemos que reiterar lo que significa la lucha contra la corrupción y el clientelismo, el no todo vale, con ejemplos tangibles", reconoció Sergio Fajardo, candidato a la vicepresidencia.